Alivio engañoso en la ocupación
El número de parados inscritos en las oficinas del Servicio Público de Empleo aumentó en abril en 118.200 personas, según los datos corregidos de variaciones estacionales. Según el mismo criterio técnico, la Seguridad Social perdió 91.900 cotizantes. Ambas variables han experimentado un ligero alivio en la tendencia destructiva que iniciaron hace un año, pero en ningún caso suficiente como para pensar que hay un cambio explícito de tendencia en el mercado de trabajo. æscaron;nicamente la irrupción del plan municipal de obras públicas ha relajado la presión del desempleo, con la creación de unos 98.000 empleos por el tiempo que duren las obras.
En abril ha habido cierta recuperación cíclica de la actividad en el turismo, con la reincorporación de contratados fijos discontinuos -con empleo en primavera y verano, y el resto del año con desempleo remunerado-, y ha descendido la llegada masiva de parados desde la construcción residencial. Pero la pérdida de empleo se concentra en todas las actividades, con un comportamiento coherente con la evolución a la baja de la demanda interna y del propio PIB. El alivio, por tanto, es engañoso mientras el paro siga sumando víctimas. No puede hablarse de cambio real de tendencia si no hay generación de empleo, que no llegará hasta que el PIB no retome el crecimiento.