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Automoción

El comité de Seat anuncia que Martorell fabricará el futuro Audi Q3

Volkswagen da un balón de oxígeno a la planta de Seat en Martorell. La planta barcelonesa fabricará a partir de 2011 el futuro todocamino Q3 de Audi, según informó ayer el presidente del comité de empresa, Matías Carnero. Una portavoz de la firma no confirmó la noticia, pero aseguró que la compañía emitirá hoy un comunicado oficial.

Volkswagen terminó de deshojar la margarita y el sí, parece ser, se lo ha llevado Seat. La fábrica que la marca española del grupo alemán posee en Martorell (localidad a unos 30 kilómetros de Barcelona) será la encargada de fabricar finalmente el Audi Q3, según anunció ayer el presidente del comité de empresa, Matías Carnero (UGT) en una intervención en el Congreso de UGT de Catalunya, que recibió la noticia entre aplausos.

El anuncio provocó ayer un gran revuelo en el sector. Sin embargo, los portavoces de la compañía rehusaron confirmar ayer la noticia. No obstante, aseguraron que tienen previsto emitir a lo largo del día un comunicado oficial. El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo estimó conveniente emitir otra nota en la que manifestó 'que no puede confirmar ni desmentir', ya que 'es una decisión que compete exclusivamente al grupo Volkswagen' y que espera hoy el anuncio. La misma postura adoptaron ayer fuentes de la Generalitat y el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho. La ministra de Economía, Elena Salgado, sí dio por buena la noticia, que calificó de 'excelente', al igual que el presidente de CiU, Artur Mas. El secretario general de la federación del metal de UGT, Manuel Fernández Lito, aconsejó cautela y dijo que la adjudicación del Audi Q3 'aún no está resuelta'.

De confirmarse hoy, la noticia supondrá un alivio para la continuidad de la planta, que en la actualidad fabrica todos los modelos de la gama con la excepción del Alhambra. La marca española, sin embargo, se ha convertido en una especia de oveja negra para VW, dado que es la única en números rojos operativos. Sus ventas cayeron el 8,8% en 2008, hasta 375.000 unidades, y han proseguido el declive en 2009, lo que ha llevado conducido a distintos expedientes temporales. Ahora todo cambia. Es probable que la producción prevista de 80.000 unidades anuales de este modelo permita eliminar el ERE de 1.500 empleados y garantiza el trabajo para 7.000 empleados de proveedores.

Para ello, han hecho falta sacrificios, algo que pedía la dirección. El vicepresidente de Volkswagen y presidente del consejo de supervisión de Seat (y de Anfac), Francisco García Sanz, pidió a mediados de marzo 'sacrificios' y 'unidad sindical' para lograr la adjudicación del modelo, y aseguró entonces que ésta era la parte más débil para lograr el acuerdo, frente a las ayudas estatales.

Así, el Q3 ha permitido a Volkswagen arrancar varios compromisos, tanto de la plantilla como de las distintas administraciones españolas. Los trabajadores han aceptado congelarse el salario durante un año. Además, la multinacional ha obtenido ayudas del Gobierno central de 100,7 millones de euros, además de una oferta de la Generalitat de participar accionarialmente en el centro técnico.

Tampoco faltaron las presiones políticas. La pasada semana el propio ministro Miguel Sebastián viajó a Alemania acompañado por el consejero de Innovación, Josep Huguet. El martes, el diario La Vanguardia aseguró que el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, envió una carta al presidente de la multinacional, Martin Winterkorn, en la que expresaba el apoyo del Gobierno a las inversiones del grupo en España. La opción de Martorell, en todo caso, nunca fue una opción mal vista. El presidente de Audi, Rupert Stadler, expresó hace dos años la disposición para producir en la planta algún coche de la firma.

Este nuevo modelo es un todocamino (una carrocería similar a la del todoterreno aunque sin buena parte de las prestaciones de éste y sobre la plataforma de un turismo). æpermil;ste es un segmento que ha conocido un considerable auge en los últimos años, hasta que la crisis frenó en seco su desarrollo. Su principal rival será el BMW X3. El coche que tendrá una longitud de unos 4,4 metros, una anchura de 1,80 metros y una altura de 1,60 metros.

Costes laborales

Las plantas españolas siguen resultando atractivas para adjudicar nuevos modelos. En 2006, la factoría de General Motors en Figueruelas venció a la de Gliwice (Polonia) con la que competía por la nueva generación del Opel Meriva. Esta planta también ganó la producción del Combo cuando GM cerró la factoría de Azambuja (Portugal). Y eso, a pesar de que, según CC OO, en España los costes laborales ascendieron en 2007 a 22,83 euros por hora. En Hungría, la cifra es de 8,99 euros, frente a los 8,83 euros en la República Checa, 6,91 euros en Polonia, 5,71 euros en Eslovaquia o 4,39 euros en Rumanía. La diferencia entre la planta de Martorell y la de Bratislava es de 595 euros por coche.

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