_
_
_
_
Recursos

Repsol entra en la puja por hacerse con los macrocontratos petroleros de Irak

Repsol YPF se ha colado entre las multinacionales elegidas por el Gobierno de Bagdad para optar a los contratos públicos que servirán para reactivar 19 campos petrolíferos en todo Irak. En principio, la Administración iraquí sólo encargará las obras de ingeniería y construcción de los pozos, si bien el Ministerio del Petróleo maneja la posibilidad de ofrecer concesiones a la explotación durante varios años en pago por dichas obras.

El Gobierno iraquí sacará a concurso público durante el transcurso de este año los contratos de ingeniería y construcción de 19 campos petrolíferos, repartidos a lo largo y ancho de todo su territorio y representativos de tres cuartas partes de las reservas nacionales de esta materia prima (la sexta mayor del mundo), y Repsol YPF va a entrar en la puja por conseguirlos, según han confirmado fuentes de la firma española.

La firma que preside Antonio Brufau quiere aprovechar esta avalancha de concesiones para entrar en el negocio petrolero de Irak, algo que ya ha intentado sin éxito en diversas ocasiones desde que en 1997 planteara al régimen de Sadam Husein un plan para el desarrollo de los campos petrolíferos de Nasiriyah.

En la puja por los contratos petroleros iraquíes, Repsol YPF tendrá que codearse con otra treintena de multinacionales del sector, que han sido contactadas por elGobierno de Bagdad con la intención de reactivar buena parte de los campos de explotación dañados por los conflictos bélicos en el país.

Más información
COMPRE LA EDICIâN DE HOY EN PDF

Contratos de servicios

El calendario diseñado por el Ministerio del Petróleo iraquí establece que los contratos de los ocho primeros campos se cerrarán durante el primer semestre de 2009, dejando para el segundo semestre la licitación y concesión de los contratos de reconstrucción de los once restantes.

Según los medios locales, esta premura se justifica tanto por la caída de los ingresos debida al desplome en el precio del petróleo, del que depende el 95% del presupuesto nacional, como por las necesidades millonarias de recursos para las tareas de reconstrucción del país.

La intención del Ejecutivo de Bagdad es que en un plazo de cuatro años la producción diaria de barriles pase de los 2,4 millones actuales a 4,5 millones.

El discurso oficial del Ministerio del Petróleo es que los contratos que se concedan a las multinacionales extranjeras preseleccionadas, entre las que se encuentra Repsol, sólo afectarán a las obras de ingeniería y construcción necesarias para poner en marcha las explotaciones petrolíferas y que luego será un organismolocal heredero de la antigua Irak National Oil Company, la que se encargue de la explotación. Sin embargo, analistas europeos y norteamericanos han expresado sus dudas sobre que el Ejecutivo iraquí cuente con los recursos suficientes para sufragar los pagosmillonarios que deberán abonar a las multinacionales contratadas para reactivar sus pozos petrolíferos, por lo que estiman que es posible que tengan que ceder temporalmente la explotación de estos pozos.

En las últimas semanas, esta tesis ha ido cobrando fuerza y enmedios locales, como el Zawya, ya han aparecido informaciones, que citan fuentes gubernamentales, que señalan que la reactivación de pozos se podría financiar en algunos casos con concesiones de explotación por 20 años.

Campo de Nasiriyah

Al margen de estos contratos públicos, el Gobierno iraquí ha preseleccionado el proyecto de Repsol YPF, junto al de la italiana Eni y el de la japonesa Nippon Oil, para la puesta en funcionamiento de un campo en Nasiriyah (300 kilómetros al sur de Bagdad) con capacidad para surtir 300.000 barriles diarios. El contrato tiene un coste estimado de 2.000 millones de euros y el concesionario se conocerá en marzo.

Diez años intentando introducirse en el país

Repsol YPF entrará en la puja por los macrocontratos del petróleo iraquí, pero no les da una importancia estratégica. "Nos interesa estar en Irak, como en otros países en los que no tenemospresencia, pero no forma parte de nuestro plan estratégico", subrayan fuentes de la compañíapetrolera.El plan estratégico de la compañía, cuya vigencia se extiende hasta 2012, prevé unas inversionesde 21.000 millones de euros, pero privilegia los enclaves situados en países OCDE, ya que suprincipal objetivo es reducir la dependencia de los inestables proveedores latinoamericanos.Irak es un sueño frustrado de Repsol desde hace más de una década. En 1997, la compañíapuso sobre la mesa del régimen de Sadam Husein un proyecto para explotar los mismos yacimientos de Nasiriyah, a cuyo contrato de obra opta ahora de nuevo -aunque sin grandes opciones de éxito, según los medios especializados que dan más posibilidades a la italiana Eni-.El proyecto acabó siendo rechazado por el régimen, que no quería que ninguna empresa extranjera controlara las explotaciones petrolíferas iraquíes (de momento, la única compañía que loha conseguido es la China Petroleum Corporation), y desde entonces lo único que ha hechoRepsol es suscribir ocasionalmente contratos de compra de petróleo.

Más información

Archivado En

_
_