Thain paga para limpiar su imagen de banquero ostentoso
El último consejero delegado de Merrill Lynch devolverá el millón que costó decorar su oficina.
John Thain ha decidido corregir la huella de una decisión, que como tantas en Wall Street, fue desproporcionada. Y lo hará pagando con su propia chequera. El que fuera el último consejero delegado de Merrill Lynch y hasta hace unos días alto ejecutivo de Bank of America, afirmó ayer a la cadena CNBC que va a devolver al banco los 1,22 millones de dólares (928.416 euros) que gastó el año pasado en la redecoración de la que entonces era su nueva oficina en Nueva York.
La factura incluía 87.000 dólares (66.204 euros) por una alfombra, 28.000 dólares (21.307 euros) por las cortinas, otros 87.000 dólares por unas sillas para visitas, una cómoda por 35.000 (26.634 euros), un escritorio estilo George IV por 18.000 dólares (13.700 euros) y un espejo de 5.000 dólares (3.800 euros), entre otras partidas. La suma se completaba con los 800.000 dólares (609.000 euros) que cobró como honorarios el decorador de Los Ángeles, Michel Smith.
Este profesional, que antes se ha encargado de las casas de celebridades como Steven Spielberg, Michelle Pfeiffer y Cindy Crawford, ha rebajado significativamente su sueldo para sus últimos clientes de alto perfil, los Obama. Smith es ahora el decorador de la Casa Blanca, aunque por decorar la sede de la presidencia de EE UU cobrará 100.000 dólares (76.116 euros).
El banquero caído en desgracia afirma que la remodelación de su despacho 'fue un error teniendo en cuenta el mundo en el que vivimos ahora'
En una nota de despedida que el domingo circuló entre los responsables de Merrill, Thain admite que los gastos en la suntuosa oficina 'fueron un error teniendo en cuenta el mundo en el que vivimos ahora'.
Pero 'el mundo en el que vivimos ahora' no es producto de un cambio repentino e inexplicable. Las semillas del desastre plantadas en la época del crédito fácil y el gasto descontrolado comenzaron a brotar en 2007 como la mala hierba. De hecho, en diciembre de ese mismo año Stan O'Neil, consejero de Merrill Lynch fue forzado a dejar su puesto ya que no pudo contener la hemorragia de pérdidas en las que incurrió el banco y John Thain fue contratado para poner orden.
En Goldman Sachs primero y en la Bolsa de Nueva York después, Thain se ganó los apodos de Mr. Fix It (por su capacidad para arreglar problemas) e Irobot, por su flema. Era el fichaje perfecto para intentar dar la vuelta al venerable banco de inversión. Tras tomar posesión en Merrill, Thain insistió en controlar el gasto y continuaron los despidos. La situación se complicó tanto que la solución pasó por vender la entidad en septiembre a Bank of America. Para entonces, Thain tomaba decisiones en su nueva y costosa oficina y pagaba a su chofer 230.000 dólares.
El detalle de las cuentas del exceso se hizo público la semana pasada, el mismo día en el que el consejero delegado de Bank of America, Ken Lewis, le pidió su dimisión, presuntamente por no haber revelado el alcance de los problemas de Merrill antes de venderle el banco. Thain dice que Lewis conocía del estado de la entidad.
Thain va a intentar dar la vuelta a este episodio y defender su gestión. Pero no será fácil. Pese a que Nueva York es una ciudad de excesos, no se olvida a Dennis Kozlowski. El ex consejero delegado de Tyco fue condenado por apropiación indebida, pero se le recuerda por la desproporcionada ocurrencia de gastar 6.000 dólares en unas cortinas de baño.