Las motos no temen la crisis

Los fabricantes de motos no parecen tener miedo a la crisis. El lunes, 1 de diciembre, celebraron en Bruselas su 5ª Conferencia anual. Y a juzgar por los mensajes lanzados, la patronal europea de ese sector, ACEM, encara la difícil coyuntura como una oportunidad de negocio frente a otros competidores.

Las intervenciones de todos los oradores llevaban títulos esperanzadores, como "el mercado del mañana" o "análisis de coste-beneficio de un cambio del coche a las dos ruedas: el caso de París". Y en el elegante vestíbulo del Residence Palace, donde la asociación celebró su encuentro, varios fabricantes mostraron novedades y prototipos con los que intentarán ganar la partida de la movilidad a otros medios de transporte.

Motos plegables y eléctricas, que se arrancan con el teléfono móvil y tienen aplicaciones de Internet, como la Yamaha Bobby (foto de arriba). O una KTM, también eléctrica (abajo), que según algunos aficionados revolucionará el motociclismo de campo (enduro, para los que saben). Con sectores tan innovadores y optimistas, el futuro parece un poco menos negro.