Repsol cederá el control que tiene en Gas Natural si entra la rusa Lukoil
La Caixa y Repsol romperían el pacto social por el que controlan de forma conjunta Gas Natural si Lukoil entra en la petrolera, con lo que el control lo ejercerá sólo la caja catalana, con un 34%. Esta es una de las soluciones ofrecidas por los accionistas de Repsol para obtener el permiso del Gobierno a la entrada de la rusa, dado el carácter regulado de Gas Natural que, además, está en pleno proceso de integración con Unión Fenosa.
Las reacciones políticas a una posible compra del 30% de Repsol por parte de Lukoil, tras el principio de acuerdo que tienen encima de la mesa el grupo ruso y los principales accionistas de la petrolera, Sacyr y La Caixa (titular de un 14,1% directa e indirectamente), no se han hecho esperar. Sin embargo, frente a la virulencia del rechazo a la entrada de Gazprom que circuló la semana pasada y luego resultó falsa, la respuesta del Gobierno ha sido más ambigua en esta ocasión: desde la ausencia de comentarios del vicepresidente económico, Pedro Solbes, al 'respeto al mercado y los accionistas' manifestada por el ministro de Industria, Miguel Sebastián, y el propio presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero.
Eso sí, ambos exigieron que, pase lo que pase, se mantenga la españolidad de la petrolera: 'Es bueno que Repsol mantenga la bandera española', dijo ayer Zapatero, quien añadió que 'el Gobierno debe estar atento' y matizó que 'el accionista mayoritario de Lukoil, la segunda petrolera del mundo, es norteamericano', en relación a ConocoPhilips, que tiene el 20%. La independencia y la españolidad ya fueron esgrimidas la semana pasada por el propio presidente de Repsol, Antonio Brufau.
Por su parte, el titular de Industria, el que manifestó con más claridad su rechazo ayer, declaró que el Gobierno 'hará todo lo posible, lo que esté en su mano, para que siga siendo una empresa española, y lo va a seguir siendo'. Sebastián destacó el carácter estratégico de Repsol, 'tanto directa, como indirectamente, por su importante participación en el capital de Gas Natural', en la que controla un 30%.
Zapatero dice que Repsol debe mantener 'la bandera española' y que la rusa tiene también capital de EE UU
Fuentes próximas al Gobierno aseguran que éste conoce desde el primer día las negociaciones de Sacyr y La Caixa para vender al grupo ruso el 20% en manos de la constructora y el 6% de Repinves (holding de esta entidad y Caixa Catalunya que tiene el 6% de Repsol). Los accionistas de la petrolera han solicitado el plácet del Gobierno alegando que 'no hay otra salida si se quiere evitar una catástrofe en cadena derivada de las dificultades financieras de Sacyr'. La constructora que preside Luis del Rivero tiene una deuda de 18.550 millones y ha puesto en venta otras participaciones, como el 91% de Itínere.
De hecho, ante el peligro esgrimido por el Gobierno de que la compañía rusa acabe controlando, además de Repsol, a Gas Natural y Fenosa, dos empresas reguladas que se van a fusionar, los accionistas han ofrecido una solución a medio plazo. Según fuentes próximas a la operación, aquélla consistiría en romper el pacto parasocial con el que La Caixa y Repsol controlan conjuntamente a su filial de gas y se reparten su consejo. Con esta ruptura, La Caixa, que no ha querido hacer declaraciones, se quedaría con la mayoría del capital, un 34%, en el que también podría reforzarse.
Se da la circunstancia de que Repsol y La Caixa se han comprometido a acudir a la ampliación de capital prevista por Gas Natural para afrontar la opa por Fenosa en los primeros meses del próximo año, en proporción a su actual porcentaje de capital. De esta manera, mantendrían en el grupo resultante de la fusión la proporción actual.
Fuentes próximas a la eléctrica, aseguran que la operación rusa 'asusta a Fenosa, pues introduce un elemento de incertidumbre, pues en Gas Natural está también Suez'. De hecho, tras la opa de Gas Natural sobre Endesa, desde el Ministerio de Economía ya se alertó del riesgo de que un grupo extranjero lanzara una opa a Repsol (una empresa no regulada y con el capital disperso en Bolsa) y de una tacada se quedara con el petróleo, el gas y la electricidad del país.
Además de este compromiso, otras fuentes empresariales apuntan a que en el pacto para la compra de casi el 30% de Repsol, Lukoil estaría dispuesta a renunciar al control ejecutivo de Repsol para ganarse el sí del Gobierno. Este extremo está por confirmar y no falta quienes ponen en duda que la rusa admita esta renuncia tras el fuerte desembolso que deberá hacer. En teoría, a Lukoil le corresponderían, al menos, los tres consjeros que Sacyr tiene ahora.
La operación no fue desmentida ni confirmada ayer por ninguna de las partes. Criteria, el holding de La Caixa que tiene la participación de la entidad en Repsol, remitió un hecho relevante a la CNMV en el que reconoció que, respecto a la venta total o parcial de su participación en Repsol, 'hasta el momento, sólo han existido contactos informales, sin que hasta el día de hoy se haya recibido oferta concreta alguna al respecto'. Desde Repsol se reiteró que ellos 'no negocian con nadie', en tanto que la constructora repitió el hecho relevante que se vio obligada a enviar a la CNMV la semana pasada, cuando circuló el bulo de Gazprom, en el que admitía negociaciones con interesados para vender su paquete en Repsol.
Desde la oposición política se rechazó la operación. El portavoz del Partido Popular, Cristóbal Montoro, criticó 'la pasividad del Gobierno' y dijo que no se saldrá de la crisis 'desmantelando' sectores como el energético. El PP ha anunciado que formulará una pregunta parlamentaria sobre esta operación al presidente del Gobierno.
Por su parte, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, se mostró de acuerdo con una posible entrada de Lukoil en Repsol, 'si hay condiciones de reciprocidad y se trata de inversiones que atiendan a condiciones financieras o estratégicas que se puedan aceptar. El hecho de que sea rusa o no sea rusa no es malo, bueno o regular, lo que hay que ver es en qué condiciones se hace', indicó.
La constructora sube el 13,23% en Bolsa mientras las petroleras se resienten
Las acciones de Sacyr Vallehermoso respiraron ayer con alivio ante la posible entrada en la rusa Lukoil en su capital. Los títulos de la constructora de Luis del Rivero subieron un 13,23% y cerraron a 7,36 euros por título. El espectacular ascenso frenó la caída del Ibex, que cerró, sin embargo, con un descenso del 2,72%.La semana estaba siendo nefasta para la constructora, que había bajado un 8,31% el lunes, el 4,67% el martes y el 3,42% el miércoles.Repsol, sin embargo, vio cómo sus títulos caían ayer el 2,51%. El hecho de que, de realizarse, la entrada de los rusos se haría sin opa, restó aliciente bursátil a la operación para los inversores de la petrolera española.Lukoil tampoco tuvo una buena jornada bursátil. Sus títulos se hundieron el 10,49%, afectados fundamentalmente por el descenso en la cotización del petróleo Brent, que ayer cotizó por debajo de los 50 dólares. La Bolsa de Moscú estuvo cerrada hasta las 10 de la mañana por decisión del regulador ante las caídas generalizadas que afectaron a ese mercado. Fuentes de la empresa rusa declinaron hacer cualquier comentario sobre la operación de Repsol, pero algunos medios locales se hacían eco, además, de que el grupo presidido por Vaguit Alekpérov estaba a punto de recibir financiación para hacerse con una refinería en Sicilia, dentro del proceso de diversificación geográfica que está llevando a cabo en el sur de Europa.Algunos analistas argumentaban ayer que Lukoil no tenía capacidad financiera suficiente para acometer una operación como la de Repsol, valorada en unos 9.700 millones de euros.