El beneficio semestral de Air France-KLM cae un 82,3% hasta 196 millones de euros
Air France-KLM tuvo un beneficio de 196 millones de euros en el primer semestre de su ejercicio contable, finalizado el 30 de septiembre, lo que significó una caída del 82,9% respecto al mismo periodo del pasado año que la compañía aérea franco-holandesa atribuyó en parte a la crisis y al petróleo.
Si se eliminan los elementos excepcionales, la caída del resultado neto semestral fue del 47,8%, precisó hoy en un comunicado Air France-KLM, que pese a todo indicó que en el conjunto del ejercicio confía en lograr un resultado de explotación "netamente positivo".
Precisamente, el resultado de explotación logrado entre abril y septiembre se redujo un 43,9% hasta 639 millones de euros, algo en lo que pesó el incremento de la factura de carburante en 687 millones de euros (+30,1%) a causa del tirón del barril de crudo.
El volumen de negocios de la aerolínea franco-holandesa aumentó un 4,4% en cifras absolutas a 12.983 millones de euros durante el primer semestre de su ejercicio, aunque en datos comparables el alza fue del 5,1%. El problema es que los gastos de funcionamiento progresaron un 9,3% hasta 12.340 millones, esencialmente a causa del citado encarecimiento del petróleo.
Además, los ingresos unitarios por pasajero bajaron un 0,3% en cifras brutas, aunque si se descuenta el efecto de variaciones de divisas hubo un incremento del 3,7%.
A fecha de 30 de septiembre, Air France-KLM disponía de un flujo de caja de 173 millones de euros y en su tesorería había 4.400 millones de euros, así como líneas de crédito disponibles de 2.000 millones. Sus deudas netas habían subido a 2.740 millones de euros, frente a los 2.690 millones el 31 de marzo.
El presidente de la compañía, Jean-Cyril Spinetta, destacó que "pese a este entorno desfavorable, el grupo consiguió un resultado de explotación de 639 millones de euros en el semestre y de 405 millones en el segundo trimestre, el mejor en Europa tanto en resultado como en margen".
Spinetta constató que el deterioro de la coyuntura se ha acelerado desde finales del verano, pero indicó que su flexibilidad ha permitido un ajuste rápido, y avanzó que se va a aplicar "un plan de ahorro complementario de 260 millones de euros que nos permitirá estabilizar nuestros costos y proteger nuestra rentabilidad".
"El grupo ya está movilizado para utilizar todas sus bazas y estoy convencido de que saldrá reforzado de esta crisis", concluyó en el comunicado.