Arcelor se replantea los planes previstos para crecer
La crisis económica mundial y la situación específica que atraviesa el negocio siderúrgico en los últimos meses también están afectando a ArcelorMittal, el gigante del sector, que hasta el momento parecía inmune a las dificultades con las que se están encontrando la mayor parte de las empresas a nivel global.
El grupo que preside el millonario Lakshmi Mittal sigue adelante con sus planes de expansión, incluidas compras puntuales. Sin embargo, la nueva situación de los mercados le está obligando a revisar su estrategia de crecimiento en lo referente a alguno de sus proyectos clave. El caso más significativo tiene que ver con la inversión millonaria que la compañía pretendía poner en marcha en Egipto.
El director financiero de ArcelorMittal, Aditya Mittal, reconoció en la última reunión con analistas, celebrada hace dos semanas en Londres, que se está planteando cancelar la construcción de una planta siderúrgica integral en el país africano, uno de los tres únicos proyectos de nuevas fábricas de este tipo que el grupo tiene sobre la mesa. La compañía ganó la licencia para levantar la planta, en la costa norte del Mar Rojo, tras presentar una oferta de 60 millones de dólares (44,4 millones de euros) en un concurso internacional.
El proyecto, que supondría la fabricación de 1,6 millones de toneladas anuales de acero y hasta 1,4 millones de toneladas de palanquilla, resulta esencial para el objetivo de ArcelorMittal de entrar en los mercados de Oriente Próximo, una de las áreas con mayor potencial de crecimiento para el sector siderúrgico a medio plazo. Según las estimaciones del grupo, el consumo per cápita de acero en la región es de 225 kilo, mientras que la media en los países desarrollados supera los 475 kilos.
El proyecto está en el aire debido a que los costes de inversión previstos inicialmente se han disparado. Por un lado, por el encarecimiento de los precios de la energía y de las materias primas que necesita la industria. Por otro, por las dificultades que están teniendo los grupos de ingeniería y los fabricantes de bienes de equipo para atender la demanda procedente del sector siderúrgico.
Ingeniería más cara
Sólo en los últimos tres años, el tiempo para llevar a cabo inversiones de equipo en las plantas se ha duplicado (los retrasos en el suministro de equipos han pasado de uno a dos años) y los costes de inversión han crecido entre un 30% y un 50%.
El resultado de todos estos factores es que el plan de inversiones previsto por ArcelorMittal para crecer en los próximos cuatro años ha pasado de suponer un desembolso de 33.000 millones de dólares (24.412 millones de euros) a costar 59.000 millones de dólares (43.650 millones de euros). Es decir, que la expansión del grupo se ha encarecido un 78%. En el caso concreto de las tres nuevas plantas de siderurgia integral (la de Egipto y las dos que se construirán en India), las necesidades financieras prácticamente se han duplicado, hasta alcanzar los 39.000 millones de dólares de inversión (28.887 millones de euros). Con estos tres proyectos, ArcelorMittal quiere ampliar su capacidad de producción de acería en 24 millones de toneladas, lo que quiere decir que cada nueva tonelada le costará 1.650 dólares.
Aditya Mittal quiso dejar claro en Londres que, pese a la nueva situación, el plan de crecimiento sigue siendo viable económicamente y tiene 'pleno sentido'. Sin embargo, el grupo va a ser ahora más estricto a la hora de materializar sus inversiones. Una política que igualmente aplicará a la ampliación prevista en la fábrica ucraniana de Kriviy Rih, que también ha sido pospuesta temporalmente por problemas de costes.
Lakshmi Mittal afirmó ayer en Washington que la crisis que atraviesa la industria siderúrgica 'no tiene precedentes'. Las turbulencias financieras han hecho mella entre algunos de los principales clientes del grupo en sectores clave como el automóvil o la construcción, lo que a partir del segundo trimestre del año se ha traducido en un recorte significativo de la demanda del acero y en la bajada de precios en algunos productos. Por ejemplo, la chapa laminada en caliente, base para la fabricación de automóviles, se ha abaratado un 6,1% en el último mes en Estados Unidos, informa Bloomberg.
Según explicó gráficamente ayer Mittal, las empresas consumidoras de acero están siguiendo una estrategia de 'esperar y ver', tirando de sus stocks con la confianza de que los precios sigan cayendo. Sin embargo, la intención de los grandes productores siderúrgicos es la de no alimentar esta espiral. Así, ArcelorMittal ya ha advertido de que reducirá su producción una media del 15% en Europa y EE UU si esta dinámica prosigue. En el caso de España, está previsto que el recorte sea mayor. Su objetivo es mantener los precios a la espera de que el mercado se reactive en 2009.
Mittal presidirá la patronal sectorial
Lakshmi Mittal, el máximo responsable de ArcelorMittal, es también desde ayer el presidente del International Iron and Steel Institute, la patronal que integra a los principales productores de acero a nivel mundial, tras la renovación de cargos que se acordó durante la 42 conferencia anual del sector, celebrada en la ciudad de Washington.En este encuentro, en el que se eligió como vicepresidentes a los máximos ejecutivos de la coreana Posco, Ku-Taek Lee, de la italoargentina Techint, Paolo Rocca, y de la norteamericana US Steel, John Surma, también se acordó rebautizar a la asociación, que pasará a denominarse World Steel Association. La patronal integra a 180 productores de acero (incluidas 18 de las 20 compañías más grandes del sector), asociaciones nacionales y regionales e institutos de investigación. Los socios fabrican cerca del 85% del acero mundial.El presidente saliente, Ku-Taek Lee, avanzó que la crisis obligará a revisar las previsiones hechas para 2009 pero aseguró que el sector crecerá en 2008 más que el PIB a nivel mundial.