Texas Pacific ayudará en la capitalización de WaMu
Washington Mutual, WaMu, ha acelerado no solo un 'Plan A' para buscar capital, sino también un 'Plan B' para negociar su venta si eso es lo que permite a esta entidad, la primera de ahorros de EE UU, evitar su caída. La búsqueda agresiva de opciones recibió ayer un espaldarazo definitivo por parte del fondo de capital riesgo TPG, que en abril inyectó junto con otros inversores 7.000 millones de dólares. Entonces, TPG obligó al banco a firmar una cláusula que impidiera la dilución de sus acciones en caso de que se tuviera que buscar más capital.
TPG ha decidido liberar al nuevo consejero delegado del grupo, Alan Fishman, de esa condición porque según le dijo en una carta, 'nuestro objetivo es maximizar la flexibilidad del banco en este difícil momento'.
Esta concesión de TPG permitió que la firma se revalorizara ayer un 48,76% en Bolsa. La primera entidad de ahorro de EE UU sufre una importante crisis pese a su gran base de depósitos porque fue uno de los bancos más agresivos en la contratación de hipotecas de tipo variable a personas de dudosa solvencia. Ahora, los analistas consideran que sus pérdidas se van a disparar y la calidad de su cartera se va a deteriorar. En lo que va de año, WaMu acumula unas pérdida de 6.330 millones de dólares, casi el doble de los beneficios que obtuvo el ejercicio precedente. Los analistas creen que en los próximos dos años puede tener que hacer frente a provisiones y pérdidas de unos 28.000 millones de dólares.
Goldman Sachs, que ha sido el consejero del banco desde hace varios meses, se ha puesto a explorar la venta de la entidad en la que estarían interesados, Wells Fargo, uno de los bancos que de momento mejor está capeando el temporal, JPMorgan, que el pasado mes de abril ya hizo una oferta que fue desestimada por WaMu, HSBC, y según especulaciones del mercado, otro banco europeo. La capitalización del banco no llega a 4.000 millones pero dadas las circunstancias del mercado y la de la propia cartera de WaMu podría venderse por menos.
Los credit default swaps del banco, el coste de asegurar la deuda de este gigante, se redujeron ayer. Si este banco, con sede en Seattle no encuentra una salida y cae, sería la mayor quiebra de un banco comercial en el país.