El BCE aleja un recorte de tipos al elevar su pronóstico de inflación
El Banco Central Europeo mantuvo ayer los tipos de interés de referencia de la zona euro en el 4,25%, pero el mensaje de su presidente, Jean-Claude Trichet, echa por tierra cualquier expectativa de recorte de tipos en lo que queda de año. El BCE empeoró sus previsiones de crecimiento e inflación y Trichet afirmó que los riesgos sobre los precios 'prevalecen'.
Sin sorpresas. Los recientes cambios en el panorama de precios y actividad en la zona euro no han condicionado la decisión del Banco Central Europeo, cuyo Consejo de Gobierno mantuvo ayer los tipos de interés en el 4,25%. En las últimas semanas, el precio del petróleo se ha recortado casi un 30% (de rozar los 150 dólares por barril en julio, a los 107 a los que cotizó ayer de media el barril de Brent), relajando en parte las tensiones inflacionistas. Además, el producto interior bruto de la zona euro se contrajo dos décimas en el segundo trimestre, dejando atrás el respiro que supuso el primero. Ambos movimientos apuntarían, en teoría, a una relajación de la política monetaria, pero al organismo presidido por Jean-Claude Trichet no le parecen, ni mucho menos, suficientes.
'Los riesgos al alza sobre la estabilidad de precios prevalecen', afirmó Trichet en la rueda de prensa posterior a la reunión mensual del Consejo de Gobierno. 'Estamos resueltos en nuestra determinación de mantener las expectativas de inflación en línea con la estabilidad de precios'. Una estabilidad que, evidentemente, está lejos de cumplirse: el IPC armonizado se relajó sólo dos décimas en agosto, pese al recorte del crudo hasta situarse en el 3,8%. Prácticamente el doble de la mencionada 'estabilidad', que los estatutos del BCE definen como 'el límite inferior del 2%'. Según anunció Trichet, ese nivel no se alcanzará hasta 2010.
Y las expectativas no son halagüeñas, pese a la relajación del petróleo. De hecho, las nuevas previsiones de Fráncfort apuntan a una inflación del 3,5% este año y del 2,6% en 2009 (una y dos décimas por encima de la anterior previsión). Pero el BCE no limitó ayer el empeoramiento del pronóstico a los precios: el crecimiento se quedará en el 1,4% este año y en el 1,2% en el próximo, según el organismo emisor (frente al 1,8% y el 1,5%, respectivamente, estimados hace apenas tres meses). Con todo, Trichet y su núcleo duro no ven probable una recesión de la economía, de modo que la preocupación por los precios sigue siendo la fundamental. Eso hace que las expectativas de recorte de tipos de interés en lo que queda de este año se hayan reducido prácticamente a la nada.
Los analistas dudan de que pueda haber un recorte antes de junio del año que viene
Fráncfort recortó también su previsión de crecimiento para este año y el próximo
José Luis Martínez Campuzano, analista jefe para España de Citigroup, cree que nadie esperaba un anuncio de inminente bajada de tipos, aunque se muestra 'desagradablemente sorprendido' por el tono de Trichet: 'Ha enfatizado los riesgos inflacionistas y ha matizado mucho el impacto de la caída del crudo. No ha vinculado el recorte del crecimiento a una relajación de precios, por las menores presiones de la demanda. Creo que su discurso sigue siendo neutral, pero incluso tendente a agresivo. No le temblaría el pulso para volver a subir los tipos aún en una situación de una actividad extremadamente débil'.
David Cano, de Analistas Financieros Internacionales, coincide en considerar que el mercado esperaba 'más sensibilidad' de Trichet respecto a la caída del petróleo y la acumulación de indicadores económicos negativos. 'En lugar de ello, ha vuelto a ceñir el énfasis a la inflación. Las Bolsas el Ibex cayó ayer un 3,11% han recibido muy mal esa disparidad respecto al comportamiento de la Reserva Federal, menos estricto, máxime si se une a ello la nueva restricción de crédito anunciada ayer. No creo que podamos ver una bajada de tipos antes de junio del año que viene'.
El Banco Central Europeo no es el único que ha optado por la estrategia de esperar y ver antes de mover ficha en el ámbito monetario. El Banco de Inglaterra, cuyo órgano rector también se reunió ayer, mantuvo los tipos de interés en el 5%. Sin embargo, el Banco de Suecia, otro país de la Unión Europea ajeno a la zona euro, elevó los tipos de referencia desde el 4,5% hasta el actual 4,75%.
Menos crecimiento para Europa
Las perspectivas empeoran por momentos y no se ve el final del túnel. El recorte de la previsión de crecimiento del BCE no será el único. Ayer mismo, el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, afirmó que la situación económica de la zona euro 'no es buena', y que la Unión Europea recortará sus previsiones de crecimiento de la actividad este mismo mes. Juncker, que también es ministro de Finanzas de Luxemburgo, afirmó que el recorte puede limitar el alza del PIB para este año al 1%, frente al vigente pronóstico del 1,7%. El líder del Eurogrupo cree probable que la ralentización se agudice aún más en la primera mitad de 2009, si bien no ve a la zona euro cayendo en recesión (dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo).