El FMI eleva la previsión de crecimiento mundial y rebaja medio punto la española
La travesía del desierto de la economía española será más larga que para el resto de las economías desarrolladas y tardará en engancharse al camino de la recuperación que se vislumbra para 2009. El FMI actualizó ayer sus previsiones realizadas en abril y, aunque mantiene su estimación de crecimiento en el 1,8% para España, rebaja en medio punto la de 2009. En este periodo, el organismo eleva sus previsiones para el resto y prevé que se inicie la recuperación.
España está en una difícil situación. Hay un fuerte ajuste del sector de la vivienda y eso en un entorno económico difícil y con inflación como en el resto de los países de Europa', explicaba ayer Charles Collyns, subdirector del departamento de análisis del FMI, tras presentar las nuevas estimaciones de la entidad. Collyns afirmaba que en el primer trimestre 'el deterioro ha sido muy fuerte. Creemos que la economía estará muy débil'.
Las nuevas estimaciones para España, la única gran economía de la Unión Europea en el que la revisión de 2009 es negativa, llega después de que el Gobierno calificara las previsiones de abril de 'excesivamente pesimistas'.
Canadá es el otro país de la economía occidental, y el único de los del G7, que hace frente a un peor escenario, aunque en este caso es para 2008.
El deterioro de la economía española se produce en un marco de desaceleración mundial que, sin embargo, no ha sido tan profundo como se temía en lo que va de ejercicio. Aunque el FMI espera un 'significativamente peor segundo semestre', la resistencia ofrecida por el primero ha llevado a sus economistas a revisar al alza buena parte de sus previsiones de crecimiento.
Y lo hace desde un punto de vista algo optimista ya que da por sentado que el barril de petróleo costará una media de 116,5 dólares en 2008 y 125 dólares el año que viene, cuando estos días el petróleo se cotiza alrededor de 135 dólares por barril y se ha llegado a los 145.
Con ello, el FMI considera que la economía mundial crecerá un 4,1% y no el 3,7% inicialmente calculado para 2009 mejorando sus perspectivas.
No obstante, el mensaje de este organismo dista de ser del todo optimista. 'La economía mundial se encuentra en una situación difícil, atrapada entre una abrupta desaceleración de la demanda en muchas economías avanzadas y un nivel creciente de inflación en todo el mundo, especialmente en las economías emergentes y en desarrollo'.
La amenaza de la inflación
La situación financiera es aún un riesgo significativo y la inflación, disparada por los precios de las materias primas, se agudizará como problema. De hecho, se espera que se sitúe en una media entorno al 3,4% en 2008 en las economías avanzadas, frente al 2,6% que se previó en abril. En las economías emergentes, cuyo gasto en alimentación es mayor, la inflación se dispara a una media del 9,1%. 'Con este telón de fondo, la prioridad central de las autoridades es contener las tensiones de precios sin perder de vista los riesgos para el crecimiento', advierte el Fondo.
China pierde fuelle y EE UU saca provecho de su estímulo fiscal
El estímulo fiscal de EE UU ha llegado en un momento muy oportuno, según decía ayer el analista jefe del FMI, Simon Johnson. Con ello el consumidor ha podido seguir sosteniendo a la economía en el primer semestre. Pero el escenario para el segundo no es tan positivo ya que según Johnson la economía americana estará estancada o sufrirá una contracción moderada.Las perspectivas de la zona euro se ven aupadas por una mejora de la situación en Alemania este año. Países como Italia ven mejorar sus previsiones de crecimiento tanto en este ejercicio como el siguiente pero desde unas perspectivas muy bajas.En China la pujante economía va a perder algo de fuelle. La proyección actual muestra una moderación del crecimiento, que pasará de casi el 12% en 2007 (entonces la economía mundial crecía a un ritmo del 5%) al 10%. En semejantes términos se revisa el crecimiento de la otra gran economía emergente del planeta, India, que pasa de casi el 12% a rondar el 10%.El problema de la inflación en las economías avanzadas se podría contrarrestar con la paulatina desaceleración de la demanda. El FMI cuenta con que en 2009 los precios de consumo vayan frenándose, aunque sólo en parte.