El PP rechazará todo acuerdo que implique alza de impuestos
El partido quiere saber cuánto dinero extra pondrá el Gobierno
Hasta que el vicepresidente económico, Pedro Solbes, no enseñe todas sus cartas y anuncie los recursos extraordinarios que está dispuesto a sumar el Gobierno central al nuevo sistema de financiación, no se conocerá si merece la pena aprobarlo o no, ya que si no se inyecta una cantidad considerable de dinero al modelo su aplicación podría obligar a una subida de impuestos, algo que rechaza de forma tajante el Partido Popular. Este es uno de los criterios básicos que maneja el primer partido de la oposición ante una negociación que prevé larga y difícil.
En la cúpula del PP se considera que el resultado del modelo aplicado desde 2006 arroja claras ventajas: la financiación de las comunidades autónomas ha crecido por encima del PIB y todas ellas han ganado en financiación per cápita. 'Esta es una prueba de que el modelo ha funcionado bien', afirman fuentes del primer partido de la oposición, que argumentan otra evidencia: 'Las balanzas fiscales publicadas por Economía demuestran también que el sistema ha servido para nivelar porque las regiones menos ricas son las que más reciben'.
También han mejorado en financiación per cápita en términos relativos buena parte de las comunidades en las que ha crecido la población, una circunstancia que no está siendo tenida en cuenta por algunos de los territorios que más presión están ejerciendo sobre el Gobierno en los prolegómenos de esta negociación.
El PP está de acuerdo con el Gobierno en que España tiene uno de los Estados más delgados del conjunto de los países federales, en que dispone de las regiones más financiadas y en que alberga los ayuntamientos con menos recursos de los países de su entorno. A partir de aquí, carecería de sentido aumentar el peso financiero de las regiones porque donde hay que colocar la atención es en las corporaciones locales, aseguran las mismas fuentes.
En todo caso, si el Gobierno no pusiera los recursos extra suficientes como para dar cobertura al nuevo modelo, habría que subir impuestos, algo a lo que se niega de forma tajante el primer partido de la oposición. Solbes, como es lógico, no dio a conocer ayer cuanto dinero extra está dispuesto a inyectar en el sistema. Se limitó a decir que el Gobierno decidirá en función de sus disponibilidades presupuestarias. Hasta que no muestre sus cartas, el PP no dirá su última palabra.
Pacto a la carta, no
El portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, afirmó ayer que 'la oferta del Ejecutivo, por intentar contentar a todos, no contenta a nadie'. En su opinión, la propuesta de Solbes 'sólo menciona el factor población, no concreta la cobertura de la suficiencia, y no hay una sola palabra sobre la solidaridad entre comunidades'. Montoro expresó su preocupación 'porque lo único que podemos deducir es que, detrás de ello, estaría el anuncio de subida de impuestos y no el elemento de austeridad que debe regir ahora la financiación autonómica'.
El portavoz adjunto del PP en la Comisión de Economía y Hacienda, Álvaro Nadal, afirmó que 'el tiempo ha venido a dar la razón al PP porque es evidente que no puede haber una financiación a la carta'.
Las comunidades populares expresan sus reservas
El PP andaluz advirtió de que si se cambia el sistema de financiación 'tiene que ser a través del diálogo de todas las comunidades mediante un modelo multilateral y por unanimidad'.El PP valenciano señaló que el crecimiento de la población y su incidencia sobre la sanidad, la educación y la ley de dependencia' deben ser criterios prioritarios a la hora de fijar el nuevo modelo de financiación.Castilla y León, a través de su presidente, Juan Vicente Herrera, consideró una 'trampa' la propuesta del vicepresidente segundo de ceder el 50% del IRPF, el IVA y los Impuestos Especiales a las comunidades porque, en su opinión, antes se deben garantizar los principios de suficiencia y equidad del sistema.El Gobierno madrileño exigió ayer al Ejecutivo central que deje de marginar a esta comunidad del programa estatal de inversiones, antes de hacer propuestas sobre nueva financiación.