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Aerolíneas

Spanair suprime la cuarta parte de plantilla y flota para capear la crisis

Ajustar la plantilla en uno de cada cuatro trabajadores; reducir la flota operativa de 63 a 48 aviones y cancelar nueve de sus principales rutas. æpermil;stas tres son las medidas más traumáticas del plan B que SAS presentó ayer para intentar recuperar la rentabilidad de su filial española Spanair, una vez que decidió en junio no aceptar la oferta de compra que le presentó Iberia.

SAS, el grupo aéreo escandinavo, desveló ayer por fin el llamado plan B para su filial aérea española. Esta espada de Damocles pendía sobre la cabeza de Spanair desde que el pasado mes de junio SAS desistió de aceptar la oferta de Iberia para deshacerse de una compañía que en los últimos tiempos acumula pérdidas trimestrales recurrentes por encima de los 40 millones de euros.

El plan B se ha traducido en un severo ajuste por el que Spanair reducirá su plantilla en 1.100 empleados y dejará en tierra 15 aviones de su flota compuesta por 63 aparatos. La tercera medida más traumática consiste en la reducción de la estructura de su red de destinos en nueve rutas deficitarias para centrarse en las más rentables e importantes.

Spanair reforzará su alianza operativa con Lufthansa, que durante el proceso de venta de la compañía se vio seriamente comprometida, dado que la única oferta de compra viable provenía de Iberia, una empresa que milita en una alianza competidora, OneWorld.

La plantilla pide la dimisión de los gestores y considera los despidos 'exagerados'

En la nueva etapa, una de las piezas clave de la operación de Spanair será su posicionamiento en la Terminal Sur de del aeropuerto del El Prat de Barcelona, que se inaugurará en primavera de 2009. Tanto la filial de SAS, como Lufthansa y la alianza Star Alliance, a la que pertenecen ambas compañías, han elegido este aeropuerto para dar la batalla a Iberia en su propio terreno.

El aeropuerto de Madrid será otra de las prioridades de la nueva Spanair, aunque quedará en un segundo plano.

En una comunicación al mercado, la aerolínea detalló que el plan de viabilidad se sustenta en cuatro pilares estratégicos: 'el redimensionamiento de la compañía, la reducción de costes, las mejoras en la eficiencia y las mejoras en la captación de ingresos'.

Junto al recorte de la plantilla , la medida que considera más urgente teniendo en cuenta el alto coste del combustible y las pérdidas recurrentes, será la de dejar en tierra 15 aviones, iniciativa que se aplicará en dos fases durante los mes de septiembre y octubre.

Diez de las aeronaves serán de la flota integrada por el modelo MD 87 que es la más antigua, por lo tanto la que más queroseno consume. Otros cinco pertenecen a la compañía Aebal, filial del grupo que durante algún tiempo se dedicó al tráfico insular en Baleares.

Las rutas 'deficitarias' que se cancelarán son las que se establecen entre Madrid-Barajas y Múnich, Gerona, San Sebastián, Granada y Oviedo, así como los enlaces entre Barcelona-El Prat y Zúrich, así como los Bilbao-Málaga y Bilbao-Jerez. La nota afirma que 'la demanda actual y futura no justifican su continuidad'.

A pesar de este recorte de capacidad, Spanair asegura que seguirá operando más del 80% de su red comercial actual y mantendrá su posición como segundo operador del mercado con 260 vuelos diarios a 48 destinos.

Los diferentes colectivos laborales de la empresa han reaccionado de manera rápida ente el lanzamiento del plan de viabilidad. Javier Navas, presidente del sindicato de pilotos Sepla en la aerolínea, exigió un cambio de dirección en la compañía con el argumento de que 'los gestores actuales que se vayan', dado que han demostrado que 'no valen' para continuar al frente de la gestión de la compañía. Pese a que el Sepla considera necesario que la empresa reduzca su capacidad y estructura nunca irán a un acuerdo de reducción de plantilla, de condiciones sociales o de cualquier otro tipo 'si los gestores actuales permanecen'.

El presidente del Comité de Empresa del colectivo de tierra en Palma de Mallorca, Jordi Mauri, manifestó que los trabajadores ven con 'mucha preocupación' el despido de 1.100 empleados. 'Llevábamos tiempo temiendo un recorte de plantilla pero no nos imaginábamos que iba a ser tan exagerado'.

La directora general de Transporte Aéreo y Marítimo del Govern balear, Joana Amengual, apoya la iniciativa al señalar que si el plan de viabilidad presentado por Spanair no funciona, el grupo SAS 'no podrá mantener mucho más tiempo la compañía con las pérdidas que acumula' y la compañía irá a la quiebra.

Marsans dice al juez que Kirchner boicoteó Aerolíneas

Los propietarios de Aerolíneas Argentinas, a través de sus representantes legales, acusaron al Gobierno argentino de haber provocado la crisis en la que se encuentra inmersa la empresa ante el juez comercial Jorge Sicoli en Buenos Aires. Marsans reconoce que la deuda exigible a fecha 30 de junio es de 220 millones de dólares (138,4 millones de euros), y no los 890 millones de dólares que proclaman los sindicatos y el ministerio de Transportes. Un informe financiero desvelado por Europa Press señala que las deudas bancarias, que ascienden a 112 millones de dólares (70,4 millones de euros), representan 'solamente un 12% del total del pasivo'. Esta cifra está por debajo del endeudamiento bancario argentino e internacional, según fuentes de Marsans.En el pasivo también hay 126 millones de dólares (79,3 millones de euros) que corresponden a una deuda contraída por la compra de aeronaves y cuyas obligaciones de pago son a largo plazo.En cuanto a deudas no dinerarias, el pasivo de Aerolíneas Argentinas y Austral figuran 145 millones de dólares (91,2 millones de euros) correspondientes a obligaciones por pasajes pendientes de uso. El apartado de contingencias por juicios y otras previsiones suma 147 millones de dólares (92,5 millones de euros).

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