Solbes asegura que Martinsa Fadesa asumió riesgos excesivos
El vicepresidente Pedro Solbes considera que los riesgo que asumió Martinsa al endeudarse en 4.000 millones para adquirir Fadesa pudieron ser excesivos. El ministro señaló que el concurso, aunque es grave, no afecta al sistema y justificó que el ICO no prestara 150 millones a la empresa para que cubriera sus riesgos de liquidez 'porque ésa no es su función'.
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, admitió ayer que el Gobierno intentó 'echar una mano' a Martinsa Fadesa a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO), pero que no fue posible porque no encajaba en las líneas de avales del Instituto.
'Es cierto que conocemos las dificultades de la empresa desde hace tiempo, y que siempre se le dijo, igual que a otras empresas, que se le echaría una mano en la medida que fuera posible, porque nosotros somos los primeros interesados en que estas cosas no sucedan', señaló Solbes en una entrevista a Punto Radio.
No obstante, Solbes explicó que el único instrumento del que dispone el Gobierno en este sentido es el ICO, cuyas líneas de actuación no contemplan el crédito de capital circulante ni la inversión inmobiliaria, motivo por el que 'desgraciadamente' no se pudo llegar a un acuerdo. 'De todas formas, el problema no son los 150 millones que se pretendía que el ICO aportara, el problema son los 4.000 millones, ahí es donde está la dificultad fundamental', señaló.
El vicepresidente económico reiteró que no es 'excesivamente partidario' de la entrada del sector público para resolver los problemas de sector privado, ya que consideró 'difícil' justificar el uso de los impuestos que pagan todos los ciudadanos para resolver los problemas de las empresas. 'Los riesgos los tienen que asumir los accionistas', señaló.
Por otro lado, Solbes reconoció que la declaración de concurso por parte de la compañía supone un 'riesgo importante' y 'un tema mayor' al que hay que prestar toda la atención, ya que en el proceso están implicados muchos agentes que pretenden salir de esta situación 'de la mejor forma posible', manteniendo al máximo el empleo y garantizando la construcción de las viviendas y la entrega de pisos a los ciudadanos.
Según Solbes, Martinsa Fadesa asumió determinados riesgos en el pasado, que pudieron ser 'excesivos' y que el actual contexto financiero le ha impedido afrontar. 'Esto no tiene que afectar a otras empresas', indicó.
No obstante, rechazó que el presidente de la compañía fuera un 'poco osado' al comprar Fadesa. 'Es un tema muy difícil de valorar, los empresarios por definición arriesgan y eso es bueno', concluyó.
Un caso específico
El vicepresidente del Gobierno aseguró que la situación concursal de Martinsa Fadesa no refleja la situación del conjunto del sistema y que por tanto no requiere intervenir sobre el sector.
'Hay otros países que actúan, es cierto, se actúa normalmente cuando se producen riesgos sistémicos (...) y puede afectar a todo el sistema financiero del país, como ha sucedido en Estados Unidos (...) pero eso no tiene nada que ver con el caso español, que es un caso específico (...)', dijo Solbes. 'Yo pretendo ser siempre optimista, creo que en este país hay condiciones bastante positivas para seguir haciendo cosas', añadió en referencia a la situación de la economía española.
Caruana y la banca
Jaime Caruana, directivo del FMI y ex gobernador del Banco de España dijo ayer en Bruselas que se ha iniciado un ajuste inmobiliario y que 'habrá que ver realmente su magnitud'. Aseguró que la situación del sistema financiero español está 'en buenas condiciones'.
Las contratas se marchan de las obras y dejan en el aire 4.300 viviendas
En la localidad coruñesa de Miño, los obreros que estos últimos meses han estado trabajando en la macropromoción de 1.200 viviendas que Martinsa Fadesa preveía levantar en la zona no ponían ayer ladrillos. Su jornada discurrió entre paseos del tajo a la furgoneta para recoger el material y la infraestructura de obra. A última hora de la tarde, la ambiciosa promoción parecía ya más un poblado fantasma que otra cosa.El mismo trajín de recogida de trastos se repetía en otros puntos de España. 'Es lo lógico', subrayaba ayer un portavoz sindical de la compañía. 'Si las contratas no cobran, no trabajan. A este paso, a final de semana no habrá ni una sola obra en construcción'.La intención de la empresa es mantener la actividad a toda costa y ayer una filial ya anunció medidas legales contra Dragados por paralizar las obras de un centro comercial en León.La perspectiva es dramática. Porque si no se avanza en las obras no se cobra y si no se cobra no se pueden pagar las deudas; y el 53% de los ingresos de la empresa provienen de la actividad inmobiliaria, porque la venta de suelo, en la que tanto se confía para salir de la crisis, apenas le proporcionó 300.000 euros en el primer trimestre.La actividad inmobiliaria ofrece rendimientos ciertos. Según sus datos, Martinsa Fadesa tiene 12.578 inmuebles en pleno proceso de venta que le podrían proporcionar hasta 2.000 millones de euros. Lo que ocurre es que la mayor parte de ese negocio (dos terceras partes) está fuera y en España sólo han colocado 4.300 viviendas.