El petróleo cae cinco dólares por la menor tensión con Irán
El precio del barril de Brent, de referencia en Europa, llegó a caer ayer seis dólares tras el mensaje enviado por el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadineyad, en el que rechazaba la posibilidad de una guerra ante la falta de acuerdo sobre la supresión del programa nuclear iraní. 'No se preocupen, no habrá guerra. Estamos haciendo los mayores esfuerzos para proporcionar paz y seguridad en todo el mundo', aseguró Ahmadineyad durante un conferencia de ocho países islámico en Kuala Lumpur (Malaisia).
El precio del barril subió hasta 146 dólares la semana pasada ante la falta de acuerdo entre Irán y los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el programa nuclear y la posible imposición de sanciones al régimen iraní. Tras el mensaje lanzado ayer por Ahmadineyad, los temores sobre la falta de suministro de Irán, el segundo mayor productor de la OPEP, se disiparon y el precio del petróleo bajó hasta 135,5 dólares. La sesión la cerró a 136,4 dólares, 5,4 dólares menos.
Al descenso también contribuyeron, según los analistas, la fortaleza del dólar frente al euro, lo que reduce las expectativas de negocio sobre el petróleo, y el debilitamiento del huracán Bertha, el primero de la temporada en el Océano Atlántico, que había provocado algunas preocupaciones sobre una posible interrupción del suministro.
Sin embargo, la caída de precio de ayer puede ser puntual. El banco de inversión JPMorgan estima que el precio del barril de Brent puede superar ya la barrera de los 150 dólares a finales de julio. 'Hay un número significativo de opciones de compra abiertas para agosto a ese nivel, con lo que parece casi una certeza que se alcanzará antes del vencimiento de esas operaciones', señaló el banco en un informe mensual.
Otra señal que invita a pensar en una posible subida del precio del crudo a corto plazo es el informe publicado ayer por el Departamento de Energía de EE UU, en el que revisa a la baja las estimaciones de producción en los países que no pertenecen a la OPEP.
Según sus cálculos pasaría de 49,45 a 49,38 millones de barriles por día. 'El aumento de la producción fuera de la OPEP podría ser aún menor que el pronostico actual, lo que probablemente generaría una mayor demanda por el crudo procedente de los exportadores y precios más altos a los proyectados actualmente', apunta el informe.