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Crisis

Iberia plantea congelar los salarios para afrontar el alza del crudo

La crisis del petróleo caldea los ánimos en Iberia. Los colectivos de tierra y los TCP (azafatas) se rebelan contra el endurecimiento de los convenios y ante la preparación del Plan Director 2009-2011, donde plantea la congelación de salarios y ampliar el ajuste de plantillas ya en marcha.

Fernando Conte, presidente de Iberia
Fernando Conte, presidente de IberiaP. M.

La plantilla de Iberia (22.500 trabajadores) sufre sentimientos encontrados. La crisis del petróleo ha oscurecido las perspectivas de futuro en una compañía que lleva doce años con beneficios. Los mensajes de la dirección que anuncian un endurecimiento de la política laboral con el objetivo de enfrentar el incremento de los costes por el combustible y la caída de la demanda, provocan un creciente descontento.

Los sindicatos que representan a los colectivos de tierra (16.800 empleados) han recibido la autorización de sus afiliados para que preparen movilizaciones si la dirección no flexibiliza su propuesta de congelación salarial en la discusión del convenio que fue denunciado el pasado diciembre.

Fuentes de los sindicatos mayoritarios en tierra dicen que la empresa no acepta un incremento del IPC real, que UGT y CC OO consideran como una reivindicación innegociable. Tal incremento es el que se consiguió en el último convenio en vigor.

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La preocupación de los representantes sindicales es aún mayor por las informaciones que reciben sobre el proceso de elaboración del nuevo Plan director de Iberia que tendrá vigencia desde enero de 2009 hasta final de 2011. El creciente deterioro de las condiciones en las que se desarrolla el negocio aéreo en todo el mundo ha convencido al presidente de la compañía, Fernando Conte, de que es imprescindible establecer un marco de ajuste muy severo, reduciendo a mínimos las perspectivas de crecimiento que estaban planteadas para el mercado Europa- Latinoamérica, a la vez que se acelera la retirada de las rutas no troncales en el mercado español.

Sobre esta perspectiva, la dirección de la compañía ha solicitado a los responsables de sus distintos negocios y departamentos que realicen un análisis detallado de las necesidades de recursos humanos. Los sindicatos entienden que tras el lanzamiento del nuevo Plan Director se plantearán nuevos Expedientes de Regulación de Empleo, tal y como viene ocurriendo desde hace más de una década en Iberia. De hecho, la compañía ha pasado en este periodo de tener una plantilla con 30.000 empleados a los 22.000 actuales.

Ahora, el temor es que Iberia pretenda ir más lejos en el ajuste de personal y plantee medidas que superen el marco de la voluntariedad que ha sido norma hasta la fecha. Los representantes del colectivo de tripulantes de cabina TCP (4.000 empleados) han tenido contactos con la dirección para tantear la renovación de su convenio que termina en diciembre de 2008. Los sindicatos advierten que llevan cuatro años con el salario congelado y que la plantilla de TCP se ha visto reducida en este tiempo en 300 personas.

Las negociaciones entre Iberia y el colectivo de 1.500 pilotos es la que aparentemente arroja señales más optimistas. Las partes ya han cerrado bloques de negociación completos, aunque todavía no han entrado a discutir el apartado salarial en el que la compañía exige la congelación.

En principio, el convenio tendrá vigencia por dos años. Contempla un crecimiento menor del inicialmente planteado para las rutas de conexión con Latinoamérica. El sindicato Sepla ha pedido que se reemplace con aviones nuevos alguno de los 11 aparatos MD 87 que la compañía dejará en tierra en octubre. Se ha estimado en 400 el número de pilotos que se han perdido en los últimos años por la falta de convenio y se plantea un crecimiento de la plantilla por encima de 100 profesionales. Se lanzará un ERE para que puedan acogerse los tripulantes en situación de jubilación.

Dietas en dólares

Uno de los temas de discusión en los convenios de pilotos y TCP es el cambio de la moneda en la que se pagan las dietas en los viajes internacionales. Ahora se entregan en dólares. Ante el deterioro de esta divisa, los sindicatos reclaman su pago en euros.

Paga de beneficios de 30 millones para la plantilla

La compañía obtuvo en 2007 un beneficio de 327 millones y de esta cantidad la plantilla va a obtener una compensación de 30 millones de euros en función de los convenios en vigor que contemplaban una remuneración en función de resultados. Los trabajadores de tierra se repartirán 17 millones.

Por otra parte, Iberia anuncio que la ocupación de sus vuelos hasta el mes de mayo se redujo en 0,2 puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior, hasta alcanzar el 79,2%, con un descenso de 1,3 puntos en las rutas de largo radio hasta situarla en el 85,2%.

La aerolínea de bandera, que no especifica el número de pasajeros transportados, registró un descenso de la ocupación en las rutas domésticas hasta el 70,9%, 0,7 puntos porcentuales menos con respecto a los cinco primeros meses de 2007, mientras que en los vuelos de medio radio la cifra se incrementó en 1,4 puntos porcentuales, hasta alcanzar el 70,7%.

Su oferta ¦mdash;asientos por kilómetro ofertados (AKO)¦mdash; hasta mayo creció un 1,8%, concentrando el aumento de capacidad en las conexiones de largo radio (6,1% más), especialmente con Latinoamérica. El mercado doméstico en los cinco primeros meses del año registró un recorte de la oferta del 14,5%, pero el de medio radio se incrementó en un 4,3%.

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