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Telefonía movil

Sarin abandona Vodafone tras cerrar un ejercicio con beneficios récord

Vodafone ha dejado atrás sus multimillonarias pérdidas, ha encontrado en los mercados emergentes un pozo de crecimiento, ha puesto las bases para compensar con los datos la caída de la voz y ha cerrado el año con beneficios récord. Pero el regreso a la rentabilidad va a significar el abandono de Arun Sarin, que deja la compañía al considerar que ha cumplido su tarea.

Llegó hace cinco años a la presidencia para remplazar a Chris Gent en la máxima responsabilidad ejecutiva del que ya era entonces líder mundial del móvil, Vodafone. Su tarea consistía en manejar un gigante creado a base de adquisiciones a precios de burbuja tecnológica, como la de Mannesmann, y pronto salieron a la luz los primeros problemas. Arun Sarin tuvo que manejar momentos complicados, como cuando perdió la batalla por el control de AT&T Wireless en 2004. Pero los años realmente difíciles todavía estaban por llegar.

En 2006, Sarin vivió sus horas más bajas al anunciar un saneamiento de sus activos por 30.000 millones de euros. Las pérdidas de ese ejercicio fueron multimillonarias, al igual que las del que se cerró a 31 de marzo de 2007. En la junta que se convocó tras la limpieza del balance, cerca del 10% de los accionistas votó en contra de su reelección y le exigió una guía clara de cómo pretendía devolver el crecimiento y la rentabilidad a la compañía.

Las cuentas del ejercicio fiscal 2007/2008 presentadas ayer suponen una respuesta sobre el terreno a la antigua pregunta.

Los ingresos de la operadora celular crecieron un 14,1% y se situaron en 44.551 millones de euros. Pero lo más importante, quizá, es que Vodafone ha vuelto a beneficios, con una ganancia netas después de impuestos y minoritarios récord de 8.348 millones de euros. Eso sí, los resultados históricos de la firma británica no han conseguido lo que se esperaba: que superaran los de Telefónica y desbancaran a la española del liderazgo mundial de las telecomunicaciones por beneficio.

No ha sido así. Las ganancias de Vodafone quedan por debajo de los 8.906 millones conseguidos por Telefónica en el ejercicio equivalente al que acaba de cerrar su rival, el de 2007. También la estadounidense AT&T está por encima, con 8.734 millones. Vodafone, por tanto, se colocaría como la tercera teleco con más beneficio, desbancando de ese puesto a France Télécom.

Un sucesor más que previsto

La clave de los resultados de Vodafone se centra en la expansión de la operadora en los países emergentes, donde logra la mayoría de su crecimiento y compensa el enfriamiento de los países de Europa occidental. Sarin también ha trabajado la rentabilidad de las operaciones y ha encontrado en el tráfico de datos en movilidad una expectativa para compensar la caída de la voz. Incluso ha firmado para la compañía un contrato con Apple que llevará el iPhone a una población de 1.400 millones de personas, después de quedarse al margen en la primera oleada de ventas del ultrafamoso móvil.

Con la tarea cumplida, Sarin ha considerado el momento de dejar su puesto en Vodafone. Lo hará en julio y pasará el testigo a Vittorio Colao, siete años más joven que su predecesor -tiene 46 años- y nacido también fuera de Reino Unido, donde la compañía tiene su sede. Si Sarin es indio con nacionalidad estadounidense, Colao es italiano y regresó a Vodafone hace dos años para encargarse del negocio europeo, pero con todas las papeletas para quitar el puesto de forma inmediata a Sarin, que pasaba por sus momentos más bajos. No fue entonces. Ha esperado dos años y la situación no puede ser más distinta.

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