Economía acelera el cambio de la supervisión financiera
No fue posible en la anterior legislatura por la falta de entendimiento con el PP, pero el nuevo escenario político permitirá acelerar el proyecto. Economía quiere simplificar al máximo la supervisión financiera haciéndola descansar, exclusivamente, sobre el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El vicepresidente económico, Pedro Solbes, confirmó ayer en el Congreso de los Diputados su intención de reformar el esquema actual de supervisión financiera, separando las propias tareas de supervisión de la solvencia de los comportamientos y las prácticas en los mercados. Economía promoverá una reordenación de competencias relativas a supervisión e inspección sobre el sistema financiero que mejore la eficacia en la vigilancia de la solvencia y competitividad de los intermediarios financieros y la transparencia de los mercados en los que actúan, dentro del marco de la política comunitaria de estabilidad e integración financiera.
El actual sistema de regulación asigna competencias a diferentes órganos en función de los supervisados, dependiendo de si se trata de una entidad financiera, una sociedad de valores o una empresa aseguradora. Este modelo sectorial se acopla de manera insuficiente y poco eficaz a una realidad de grupos con tendencia a la prestación de servicios financieros universales, circunstancia que ha llevado a numerosos países europeos a su reconsideración.
Según fuentes gubernamentales, el esquema sobre el que trabaja Economía descansa en trasladar al Banco de España y a la Comisión Nacional del Mercado de Valores la práctica totalidad de las competencias sobre supervisión. El primer organismo se ocuparía del control del riesgo de todo el sistema financiero en su conjunto, incluidas las entidades aseguradoras, y el segundo de las conductas y de los productos que las distintas entidades sacan al mercado. De esta forma, se separaría lo que es la vigilancia sobre la solvencia de las entidades que participan en el mercado de los productos que ofrecen a los clientes. Ello supondría la desaparición de la Dirección General de Seguros, actualmente dependiente del Ministerio de Economía. La tarea de supervisión financiera se encuentra repartida entre esta última Dirección, el Banco de España y la CNMV.
La Dirección General de Seguros es la más afectada ya que se prevé que pierda su actual función
El actual presidente de la CNMV, Julio Segura, siempre ha apostado por equiparar la autonomía jurídica y presupuestaria de la Comisión con la del Banco de España. æpermil;ste no depende de la ley de organización de la administración pública como la CNMV y su presupuesto no se consolida con los del Estado. Segura también está de acuerdo en unificar en el Banco de España y la CNMV la vigilancia de la solvencia y de las prácticas del conjunto del sistema.
Oposición del PP
Una reforma similar a ésta fue propuesta por el anterior Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero al Partido Popular al final de la legislatura pasada, pero la iniciativa no prosperó por dos motivos: el primer partido de la oposición no terminó de digerir la designación de Miguel Ángel Fernández Ordóñez como gobernador del Banco y, por otro lado, el acuerdo no fue posible porque el PP consideró que si entraba a negociar esta reforma daba una conformidad excesiva a los cambios introducidos en los órganos de supervisión sobre los que ha había centrado buena parte de sus críticas.
En el área económica del Gobierno se echaba de menos en la anterior legislatura esta falta de acuerdo con el PP sobre la reforma de la supervisión financiera, de ahí que el proyecto pasara a engrosar la lista de promesas electorales.
También está pendiente de abordarse la reforma de la estructura interna de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, otra asignatura que queda para esta legislatura, al no haber sido posible contar tampoco con el respaldo del PP antes de las pasadas elecciones generales.
Bruselas también moderniza el marco europeo
El consejo de Ministros de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin) también aprobará el próximo miércoles en Bruselas un calendario de modernización de la regulación comunitaria del mercado financiero, informa Bernardo de Miguel. El plan prevé reforzar la actuación de los comités europeos de supervisión de banca, seguros y bolsa, así como la vigilancia sobre los grupos financieros con actividad en varios países de la Unión Europea. Bruselas insiste en que ese proceso de revisión ya había comenzado antes de que se desencadenasen las turbulencias financieras el pasado verano. Fuentes comunitarias reconocen, sin embargo, que la prolongada inestabilidad de los mercados ha obligado a las instituciones europeas a colocar la reforma del marco financiero en un lugar prioritario de su agenda.El mismo miércoles, los ministros de Economía aprobarán otro documento de conclusiones en el que abogan por la convergencia de las normas nacionales de supervisión y información contable de las entidades financieras.El documento exigirá a los supervisores nacionales, además, un compromiso de intercambio de información para facilitar una vigilancia global y coherente en toda la Unión.El Ecofin estudia la posibilidad de que el mandato de esos supervisores nacionales pueda incluir una dimensión comunitaria, lo que les impondría legalmente la obligación de tener en cuenta en su actuación el conjunto del mercado comunitario.Todas estas medidas fueron pactadas por los ministros en su reunión informal en abril en Brdo (Eslovenia). Ahora, el Ecofin las revalidará oficialmente.En aquel encuentro, los ministros también pidieron a las entidades financieras que revelaran 'de manera completa e inmediata' las pérdidas registradas como consecuencia de la crisis de las hipotecas basura estadounidenses (subprime).A largo plazo, Bruselas también se planta revisar el papel de las agencias de calificación y el funcionamiento de los sistemas de garantías.