Un espíritu de sano inconformismo
El Consejo de Trabajo, Económico y Social de Cataluña ha perdido a su presidenta, víctima de una dolorosa enfermedad. En estos momentos de consternación nos reconforta recordarla a través de estas palabras escritas en un medio de comunicación del que fue destacada articulista.
Mercè ha aportado toda su energía al trabajo, nada fácil, de aunar voluntades y sensibilidades muy distintas en el seno del Consejo. Sindicatos, patronales, economía social, sectores de actividad agrícola y pesquero, así como expertos, hemos tenido el honor de ser testigos de una manera, efectiva y nunca histriónica, de hacer las cosas. Sin ruido y eficaz.
Haciendo gala de su saber hacer, adquirido y demostrado en múltiples responsabilidades del mundo empresarial, universitario y político, nos ha legado los mejores resultados profesionales y el mejor de los recuerdos personales.
Mercè contagiaba impulso, ganas de avanzar siempre un paso más allá, de encontrar soluciones creativas a los viejos y a los nuevos problemas. Sano inconformismo en definitiva. Una cabeza muy bien amueblada, una larga experiencia de buena gestión en diversos terrenos y la capacidad de marcarse constantemente nuevos retos hicieron de ella una persona muy especial.
Y muy valiosa. Aún más para una institución como la nuestra, que busca nuevos enfoques y una voz común para asesorar al Gobierno autonómico en asuntos laborales, económicos y fiscales. Es una misión que cumplimos a través de dictámenes sobre la normativa futura, y mediante estudios e informes que nos encarga el Ejecutivo o que proponen los miembros del Consejo.
El resultado es que el espectro de temas a analizar reclama los más amplios conocimientos posibles -apoyados en un buen equipo técnico-, mentes bien abiertas para la negociación y, sobre todo, cercanía a los asuntos que tratamos. Las recomendaciones que elevamos al Gobierno se basan, precisamente, en la experiencia que tenemos de los asuntos vividos en primera persona, sobre el terreno. Aportamos, en suma, la visión más próxima. Todas esas condiciones se dieron también en la persona de la presidenta.
En todo caso, como nos consta sobradamente que no le gustaban las lamentaciones sino las soluciones -obtenidas a través de una gran tenacidad y perseverancia-, nos deja las ganas de seguir ilusionados en la tarea que hacemos. Como ella, estamos convencidos de que desempeñamos un papel importante en el sistema democrático, porque sin el parecer de trabajadores, empresarios, expertos, representantes de la economía social y de los sectores de actividad no se puede construir una sociedad más equitativa y justa.
Algo que merece nuestro mejor recuerdo y nuestro mayor agradecimiento.
Joan Canals. Vicepresidente del Consejo de Trabajo, Económico y Social de Cataluña