Las emisiones hipotecarias deberán ser más transparentes
La desconfianza de los mercados ha provocado que las entidades lleven meses sin lograr colocar emisiones hipotecarias. Para reactivar este mercado, el Gobierno ha endurecido algunos requisitos de estos bonos. El objetivo es hacer más transparentes estas emisiones para atraer a los inversores extranjeros.
Una de las principales asignaturas que tendrá que aprobar el nuevo Gobierno socialista una vez que se constituya es la de devolver la confianza de los inversores hacia el mercado financiero español.
Aunque las turbulencias de los mercados y la crisis de liquidez es generalizada, e incluso es más acuciante en Estados Unidos o Reino Unido, las entidades financieras españolas han trasladado su preocupación al Gobierno. Consideran que, de no resolverse pronto la falta de liquidez y abrirse mercado de emisiones, el problema puede agravarse mucho.
De momento, el Ejecutivo, a través de Tesoro y del Banco de España, ha preparado un proyecto de Real Decreto por el que se desarrollan determinados aspectos de regulación del mercado hipotecario. El objetivo es obligar a las entidades financieras que emitan títulos hipotecarios, como cédulas o bonos, a especificar las características de los activos que respaldan dicha deuda para intentar hacer más atractivas las emisiones españolas y recuperar la confianza de los inversores.
De esta forma, las entidades deberán llevar un registro contable en el que detallen el capital y la fecha de apertura y vencimiento de cada una de las hipotecas que garantizan o están afectadas por la emisión de la deuda. También deberán señalar el carácter fijo, variable o mixto de cada préstamo, el valor de tasación del inmueble sobre el que se ha constituido la hipoteca o el carácter residencial o comercial del inmueble hipotecado.
El encargado de determinar otros datos esenciales de ese registro será el Banco de España, que además obligará a las entidades a incluir en sus cuentas anuales 'el valor nominal de la totalidad de la cartera de préstamos y créditos hipotecarios'.
El futuro Real Decreto desarrolla la regulación de la nueva ley hipotecaria en materia de emisiones de cédulas, bonos y participaciones. Y ha sido valorado por la banca como una medida más para demostrar la 'transparencia, seriedad, rigurosidad y estabilidad' de la deuda hipotecaria que colocaban bancos y cajas antes de la paralización en agosto de los mercados.
Créditos a la cúpula en condiciones de mercado
El proyecto de real decreto sobre el mercado hipotecario se ha sometido ya al trámite de audiencia pública, por lo que se prevé que su aprobación se produzca en breves semanas. Bancos y cajas esperan que ésta no sea la única iniciativa del Gobierno para que puedan conseguir liquidez. Más aún, cuando esta norma estaba prevista antes de que se agudizará la crisis de los mercados, aunque ha sufrido retoques desde entonces. La nueva regulación incluye la prohibición a presidentes, consejeros o directores generales de las entidades de obtener préstamos hipotecarios 'salvo en condiciones de mercado y previo acuerdo del consejo de la entidad, en una reunión en la que no podrá participar el interesado'. Los empleados de bancos y cajas cuentan, por lo general, con ventajas para la suscripción de hipotecas en las entidades en las que trabajan.