Las empresas del Ibex ponen freno al endeudamiento
La carga financiera se desacelera y crece un 10% en 2007 tras años de fuerte aumento que han hecho mella en los gastos financieros. Los analistas ven sólidos la mayoría de los balances.
Las grandes empresas cotizadas han puesto coto a su carga financiera después del festín de compras, financiadas con talonario, visto en los últimos ejercicios. La deuda bancaria neta de las compañías no financieras del Ibex 35 asciende a 230.468 millones de euros, un 160% más que a finales de 2004. Pero el crecimiento se ha desacelerado mucho en los últimos tiempos; creció sólo el 10% en el último año. Un ritmo menor que el de los beneficios empresariales -el 15%- y que el del beneficio neto -26%-. Esto no evita que los gastos financieros generados por dichos créditos se hayan situado en 15.200 millones de euros, un 26,5% más que a 31 de diciembre de 2006.
La carga financiera se ha convertido en un problema para las empresas cotizadas de un tiempo a esta parte, debido a la crisis crediticia desatada por las hipotecas subprime en Estados Unidos. De repente, las entidades financieras cerraron el grifo del crédito por la incertidumbre sobre la pérdida de valor de activos financieros complejos. Y en Europa no hay expectativas de que las autoridades recorten los tipos de referencia, como en Estados Unidos. De hecho, buena parte del endeudamiento se generó cuando los tipos en España estaban en mínimos. Llegaron al 2%.
En términos agregados, los gastos financieros de las firmas del Ibex supusieron en 2007 el 5,7% de su facturación. Y hay algunos casos especialmente llamativos, como Cintra, donde llegan a suponer más dinero que los ingresos (véase gráfico), o Colonial, que ingresa 840 millones y paga al banco 450. Respecto al beneficio neto de explotación (Ebit) -el resultado que obtienen las firmas de su actividad habitual, sin contabilizar ni extraordinarios, ni impuestos, ni intereses-, los costes financieros representan el 33,9%. En esta cantidad no se incluyen las cifras de Sacyr ni Red Eléctrica, que aún no han presentado sus cuentas de 2007.
Los créditos pueden poner en peligro los dividendos de algunas empresas inmobiliarias
Los expertos aseguran que la mayor parte de las firmas industriales goza de balances saneados
'La fragilidad de las entidades financieras en los mercados ha supuesto que los costes de financiación se multipliquen hasta por cuatro o cinco veces. Hace unos meses, la media era de euríbor más 30 puntos básicos y ahora está en euríbor más 90', explica Pablo Lladó, director de mercado de capitales de Crédit Agricole. Este experto considera que la peor parte se la van a llevar algunas compañías constructoras o inmobiliarias, uno de los sectores que adolece de unos mayores niveles de endeudamiento. 'Las compañías que estén más expuestas al mercado inmobiliario son las más problemáticas; les va a costar mucho refinanciarse', concluye.
Belén Sánchez, gestora de renta variable de Popular Gestión, asevera que habrá algunas compañías que se verán obligadas a replantearse la retribución al accionista ya que tendrán como prioridad reducir su deuda. Por ejemplo, Reyal Urbis, que presentará sus resultados el próximo lunes, no podrá destinar a retribuir a sus accionistas más del 31% del beneficio de la sociedad individual. Hasta septiembre, la compañía registraba pérdidas.
Son, con todo, casos puntuales. Si se atiende a los ratios de apalancamiento -agregados como el número de veces que el Ebit está recogido en la deuda neta- todavía no hay razones para preocuparse, según los expertos. De hecho, la relación entre beneficio de explotación y deuda mejoró en 2007.
Juan José Fernández Figares, director de análisis de Link Securities, explica que la gran mayoría de las empresas está preparada para capear un entorno de crédito complicado: 'Telefónica y la mayor parte de las empresas industriales, como Repsol, han cuidado bastante este aspecto, y no es de prever que tengan problemas serios, ni siquiera en el medio o largo plazo', afirma. En la misma línea, David Navarro, de Inversis, que tienen margen de maniobra suficiente como para soportar cualquier contingencia: 'La solvencia de las empresas españolas es una de las mejores de Europa y del mundo', sentencia. Ni siquiera entre los más importantes representantes del sector constructor, los más mencionados cuando se habla de problemas de crédito, se prevén problemas, según algunos análisis. Javier Ruiz-Capillas, experto en el sector de ING, asegura que ACS y FCC gozan de buenos escudos para afrontar los problemas crediticios e inmobiliarios.
Los bancos y la aseguradoras no tienen deuda financiera, aunque han de cumplir con los requisitos del Banco de España, emiten bonos y están en el ojo del huracán ante eventuales inversiones en activos afectados por la tormenta subprime, como revela un gran número de entidades europeas. Un experto que prefiere no ser identificado señala que 'vía provisiones lo han hecho muy bien, pero probablemente los que se incorporaron más tarde al crédito inmobiliario, especialmente a partir de 2005, padecerán más problemas que los que lo hicieron en 2000; de cualquier forma, hay que esperar a auditorías de 2007 para comprobar qué ocurre', agrega. En cualquier caso, los bancos españoles sí han sufrido en sus cotizaciones las órdenes de venta, quedando en los últimos puestos del Ibex 35 en 2008. Banco Santander pierde un 19,34%; BBVA, un 17,9%; Sabadell, un 17,68%; Banesto, un 14,58%; Bankinter, un 21,83%; y Popular, el que mejor aguanta, retrocede un 11,03%.
Belén Sánchez, gestora de renta variable de Popular Gestión, asegura que un alto nivel de endeudamiento repercute directamente en la evolución en Bolsa y señala como ejemplos los comportamientos en el año de Acciona o Sacyr Vallehermoso, entre las peores del Ibex 35 con retrocesos del 24,06% y del 22,07%, respectivamente.
Un reciente informe de Jeffrey Palma, experto de UBS, señala que el 'mercado está mejor preparado ahora que en el pasado para sortear los problemas crediticios', lo que no evitaría que siga sufriendo. 'La presión sobre empresas muy endeudadas probablemente se mantendrá mientras las condiciones de crédito sigan siendo tan duras. Es más, todavía podemos estar más cerca del principio de este ciclo que del final', agrega.
Muchas compras en el exterior
La aventura exterior que iniciaron las principales empresas españolas en la década de los noventa ha disparado su deuda. Sólo el pinchazo de la burbuja tecnológica a comienzos de este siglo ha supuesto un paréntesis en la agresiva política de adquisiciones en el extranjero puesta en marcha por los blue chips de la Bolsa española. Así, la carga financiera ha pasado de 81.759 millones de euros a finales de 2002 a cifrarse en 230.468 millones el pasado mes de diciembre.Primero fue la conquista de América Latina, donde los bancos, Telefónica y Repsol han construido importantes franquicias, y luego Europa, EE UU e incluso los mercados asiáticos. La mayor compra la ha protagonizado Banco Santander al hacerse con parte del negocio de ABN Amro por 19.900 millones de euros. Esta operación se ha financiado con una emisión de convertibles de 7.000 millones, las plusvalías generadas por la venta de algunas de sus participaciones y la venta de inmuebles.En años anteriores destaca la compra de la británica O2 por Telefónica en 2005, la de BAA por parte de Ferrovial o la opa lanzada por Iberdrola sobre Scotish Power.La más endeudada es Telefónica con 45.284 millones de euros, seguida por Ferrovial con 30.265 millones y Endesa, con 21.412 millones de euros. Pero el salto más grande lo ha dado Iberdrola, que en 2006 tenía una carga financiera de 13.119 millones y ahora de 20.470.
Primeros puestos. Las empresas con más y menos deuda
Ferrovial y su deuda en BBALa compra de BAA todavía planea sobre el grupo constructor. A cierre del año pasado, la deuda financiera neta de Ferrovial se situaba en 30.265 millones de euros, aunque ha conseguido reducirla un 8% respecto a 2006. Además, a partir del próximo 11 de marzo, tratará de cerrar la refinanciación de la deuda asumida con la compra del gestor británico de aeropuertos.Renovables debe menos dineroLa filial de la eléctrica es la más joven debutante del mercado. Se estrenó el 13 de diciembre, pero no se incorporó al Ibex hasta enero. Sus gastos financieros casi se han duplicado, hasta alcanzar los 191 millones, con lo que representan más del 20% del volumen de negocio. Ha logrado reducir su carga financiera el pasado ejercicio un 74%, hasta los 803 millones, después de la OPS.Acciona dobla su carga financieraEl grupo constructor ha duplicado el pasado año su carga financiera neta, que alcanza ya los 17.804 millones de euros. Acciona busca ahora alternativas para refinanciar los 1.691 millones de euros de deuda contraída en la opa sobre Endesa. Los gastos financieros también se le han disparado un 180,7%, hasta 723 millones de euros, y representan más del 9% del negocio.Telefónica, la primera retiradaHa sido el primer peso pesado de las empresas españolas en renunciar a emitir bonos para obtener fondos. Lo hizo en agosto, un mes en el que la crisis de liquidez ya había hecho mella. La operadora, además, ha refinanciado deuda para poder afrontar los vencimientos de varios años. Para este ejercicio, ha reducido sus compromisos de pago desde los 19.500 hasta los 2.700 millones.Abertis y sus últimas comprasLa incorporación de la deuda financiera de la francesa Sanef elevó en 2007 los costes financieros de Abertis un 20,4%, hasta los 669,8 millones de euros. Estos gastos suponen ya en la compañía el 18,9% del total de su volumen de ingresos. La carga financiera neta se elevaba el pasado mes de diciembre a 12.510 millones de euros, un 6% más que a finales de 2006.Iberia aumenta un 45% su cajaLa aerolínea es, junto a Bolsas y Mercados Españoles y Telecinco, una de las pocas empresas del Ibex 35 que puede presumir de acumular un excedente de caja. El pasado año, Iberia aumentó éste un 45%, hasta los 2.500 millones de euros. Telecinco, sin embargo, redujo su caja desde 396 a 13 millones, debido a su entrada en el capital de Endemol y a la compra de Caribevisión.Los gastos financieros de las grandes compañías supusieron el 5,7% de su facturación