Polonia gana atractivo para la inversión
El crecimiento económico, la llegada masiva de fondos estructurales o las nuevas infraestructuras hacen de Polonia un país atractivo para los inversores extranjeros, según los autores. Además, las reformas legales en marcha favorecerán la implantación de nuevas empresas
A lo largo del año pasado se han cumplido en Polonia muchas de las expectativas que ya avanzábamos exactamente hace doce meses en este diario. Sigue la tendencia del crecimiento económico por encima de la media de la UE, un 6,5% en 2007. Igualmente, continúa el descenso de desempleo, que actualmente se encuentra, en torno al 11%. A finales de 2007 observamos, no obstante, un aumento de la inflación, de acuerdo con la tónica general de los mercados internacionales. En este contexto, las inversiones extranjeras directas siguen una dinámica positiva, con aproximadamente 12.000 millones de euros invertidos en 2007, cifra similar a la del anterior 2006.
Además, en el año 2007, algunos eventos han traído cierto optimismo a la sociedad polaca y a los inversores extranjeros. En primer lugar, la composición de un nuevo gobierno de carácter liberal liderado por Donald Tusk. Sus grandes retos serán, entre otros, la reforma de la administración pública y la política fiscal y monetaria, con vistas al ingreso en la zona euro en la hipotética fecha de 2013.
Por otra parte, nos encontramos ante una inminente puesta en marcha de los programas operacionales de los Fondos Estructurales de la UE del presupuesto 2007-2013. Es importante destacar que uno de los grandes retos de Polonia, el mayor receptor de los Fondos Estructurales en los próximos años, está en la organización de la administración pública para garantizar el aprovechamiento de los mismos.
En otro orden de cosas, el 18 de abril de 2007, Polonia y la vecina Ucrania fueron elegidas para organizar de forma conjunta la Eurocopa 2012. La preparación de este evento ha elevado exponencialmente las expectativas inversoras en Polonia, ya que su organización requerirá numerosas infraestructuras, además de la modernización de las ya existentes: estadios, aeropuertos, vías terrestres, hoteles, etc.
Las necesidades de infraestructuras están en íntima relación con el desafío legislativo de la creación de instrumentos jurídicos modernos y funcionales que permitan afrontar este reto. Cabe destacar, entre otras, las reformas que probablemente tendrán lugar en lo que se refiere a la normativa sobre contratos públicos, particularmente respecto al régimen jurídico de las concesiones administrativas. Asimismo, como una reforma cada vez más urgente se plantea la modificación de la normativa referente a proyectos tipo 'ppp' (colaboración público privada), regulados con una Ley de 2005. El objetivo de esta ley era propiciar la colaboración entre entidades públicas e inversores privados, a efectos de realizar diversos proyectos de utilidad pública, aprovechando la experiencia y la solvencia (entre otros, financiera) de inversores privados. Sin embargo, la actual complejidad de los procedimientos de inversión previstos en la ley en cuestión ha impedido que la misma surta el efecto deseado. Actualmente se trabaja en una amplia reforma legal en este sentido.
Por lo que se refiere al mercado inmobiliario, sigue siendo un sector de gran importancia para los inversores, a pesar de que los precios en el mercado residencial en las principales ciudades polacas se han estabilizado, tras la resaca de las grandes subidas de los años 2005 y 2006. Desde nuestro despacho notamos, asimismo, el creciente interés por la inversión en las ciudades secundarias de Polonia. Los inversores españoles demuestran, asimismo, su interés por invertir en otro tipo de inmuebles que los destinados a la construcción de vivienda, por ejemplo, en el mercado de oficinas o suelo industrial. Los problemas legales en este sector siguen siendo los mismos, a pesar de que desde hace tiempo se habla sobre la urgente necesidad de reforma, principalmente en diversas cuestiones de Derecho urbanístico y de construcción.
En el ámbito de la industria, una gran oportunidad de inversión son las Zonas Económicas Especiales de Polonia, donde la actividad económica se lleva a cabo en condiciones preferenciales para el inversor. A lo largo de 2007, más inversores extranjeros, entre ellos, españoles, han invertido en estas zonas.
Uno de los sectores que se perfilan como de mayor interés para la inversión española en Polonia es el de las energías renovables. En sintonía con las exigencias de la normativa europea, el objetivo del gobierno polaco es que el país tenga en 2020 un 14% de fuentes renovables de la energía. Actualmente, es tan solo del 5,5%, lo que supone el gran interés por parte de los inversores en Polonia.
Finalmente, a título general, es interesante destacar las reformas que se quieren introducir para facilitar la constitución y gestión de empresas en Polonia, como por ejemplo los registros de empresas por vía telemática, reducción de plazos administrativos, o las facilidades procedimentales para empresas comunitarias.
Esperamos que estos planes de reforma pronto se hagan realidad para garantizar que las excelentes oportunidades de negocio en Polonia vayan acompañadas por las condiciones jurídicas propicias para seguir atrayendo la inversión y garantizar el correcto desarrollo económico del país en el futuro próximo.
Katarzyna Kuzma / José Luis Villacampa. Abogados del departamento de español del bufete polaco Domanski Zakrzewsli Palinka