Cierra en Huelva la primera empresa tras el 'caso Fertiberia'
El efecto dominó del caso Fertiberia, que deberá abandonar su producción para eliminar las balsas de fosfoyeso, arrancó ayer en el Polo Químico de Huelva con el primer anuncio de cierre. Se trata de la firma Nilefós Química, que ha presentado un expediente de extinción de empleo que afecta a unos 200 trabajadores, 118 directos y otros 80 indirectos. La antigua filial de la multinacional francesa Rhodia, que el pasado año fue adquirida por la compañía ugandesa MISA, tiene a Fertiberia como principal proveedor de ácido fosfórico, la materia prima que utiliza Nilefós para producir el fosfato de sodio (TPFS) que vende sobre todo a los fabricantes de detergentes. Con unas 60.000 toneladas de ácido fosfórico adquiridas cada año, Nilefós es una de las compañías más dependientes de Fertiberia junto a Foret y Atlantic Copper, todas ellas empresas vecinas del polo químico onubense. Las 16 fábricas químicas de este parque vienen denunciando fuga de inversiones y posible cierre de empresas 'por la inseguridad' que dice sufrir este sector químico.
Luciano Gómez, responsable sectorial de UGT, cree que este 'efecto dominó' se está acelerando ante las pretensiones de Fertiberia de renegociar al alza el precio de la materia prima que vende a otras empresas para compensar la inversión millonaria que le exigirá la Administración en tareas de recuperación medioambiental antes de dejar de producir. El sindicato pide ayudas para el sector y que se busquen alternativas de reindustrialización.
La Junta rechazó ayer el expediente y la empresa alegó las pérdidas acumuladas en los últimos meses tras el alza de la materia prima y las 'incertidumbres' por la prohibición de los fosfatos. Nilefós es un holding que el grupo MISA creó en Europa en 2005 con activos adquiridos tras la crisis de Rhodia.