Hacen falta más ópticos en el mercado español

Un recién diplomado en óptica encuentra su primer trabajo en tres semanas y más de la mitad se ocupa antes de finalizar la carrera

En España existen diez universidades que imparten la diplomatura de óptica y optometría y se reparten de forma irregular por la geografía española: Andalucía (Granada), Aragón (Zaragoza), Castilla y León (Valladolid), Cataluña (Barcelona), Galicia (Santiago de Compostela), Madrid (Madrid), Murcia (Murcia) y Valencia (Valencia y Alicante). Esto implica que existen grandes zonas donde la escasez de ópticos afecta gravemente al sector. Toda la zona norte, Extremadura o las islas son un claro ejemplo de este problema.

Todas las ópticas tienen la obligación legal de contar con un óptico diplomado durante todas las horas que el establecimiento esté abierto al público. De hecho, esta es una de las principales salidas profesionales para los diplomados en óptica y optometría. Es en las ópticas donde se realizan más del 60% de los exámenes visuales.

La Agencia de Calidad del Sistema Universitario de Cataluña estima que un recién diplomado en óptica encuentra su primer trabajo en tres semanas y que más de la mitad se ocupa antes de terminar la carrera. Por todo ello, la captación de profesionales es uno de los principales retos de los departamentos de recursos humanos de las empresas del sector óptico.

En cuanto a los perfiles, la mayoría de los estudiantes son mujeres, y el sueldo medio del sector se sitúa en unos 25.000 euros brutos al año para un recién titulado.

Actualmente, las salidas profesionales del óptico-optometrista son varias. dirección técnica en establecimientos de óptica, óptico-optometrista en centros sanitarios públicos o privados (CAP, servicios de oftalmología, consultas o clínicas oftalmológicas, gabinetes optométricos). En caso, de que el titulado tenga algún curso de posgrado o máster y pueda tener la posibilidad de especializarse en investigación, hay que añadir como posible salida profesional la de laboratorios e instituciones dedicados al desarrollo de productos. El 70% de los titulados, según un dato que maneja la facultad de química de Murcia, trabaja como profesional liberal, y el resto como asalariados contratados. Sin embargo, cada vez es mayor el número de diplomados que son reclamados por otros sectores, como clínicas oftalmológicas, empresas de fabricación de lentes oftálmicas o de instrumentos de óptica.

En el sector público, un pequeño porcentaje de los titulados se dedica a la docencia, preferentemente universitaria, mientras que otra porción, aún menor, trabaja como profesional de la salud pública en el ejército o dependiendo de alguna comunidad autónoma, posibilidad que, según la Universidad de Murcia, debería aumentar y generalizarse en un futuro próximo.

Además al futuro titulado en óptica y optometría se le aconseja, para entrar en el mercado laboral de forma competente, aprender idiomas, informática, contabilidad y gestión.

Primera diplomatura semipresencial

Frente a la falta de ópticos en determinadas zonas de España, General âptica ha decidido tomar cartas en el asunto y apoyar la puesta en marcha, por primera vez, de la modalidad semipresencial de la diplomatura en óptica y optometría. Hace dos años que la compañía, con 225 establecimientos y con más de 500 diplomados en plantilla, se implicó en este proyecto con la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), con el total apoyo de su equipo de gobierno, y la participación de la Escuela Universitaria de âptica y Optometría de Terrassa. Los primeros 33 estudiantes de esta nueva modalidad se matricularon en el 2006 en el programa piloto obteniendo resultados óptimos y dando pie a que la inscripción se haya abierto este año a todos los estudiantes que lo deseen de cara al curso 2007-2008 con un total de 30 plazas. General Optica cuenta con 30 trabajadores estudiando los cuatro años que dura la diplomatura semipresencial en la Escuela Universitaria de âptica y Optometría de Terrassa. La compañía incentiva a los empleados que quieran obtener este título proporcionándoles las horas necesarias para acudir a las prácticas obligatorias o a los exámenes y becando los desplazamientos, alojamientos y dietas. Esta es una de las formas de la compañía para conseguir nuevos ópticos en las zonas donde no existen escuelas de óptica. General âptica mantiene contacto con las diez escuelas de óptica españolas, a las que ofrece prácticas para alumnos.