La cúpula de CC OO rechaza la jubilación anticipada de los funcionarios y UGT la apoya
Las direcciones confederales de los sindicatos CC OO y UGT tienen posturas radicalmente distintas sobre la futura regulación de la jubilación anticipada y parcial de los empleados públicos de todas las administraciones.
La discrepancia entre ambas cúpulas quedó ayer patente tras la rueda de prensa que dieron los responsables de las federaciones de la función pública de CC OO, UGT y CSIF-CSIC para presentar una manifestación que se llevará a cabo hoy en Madrid, con el fin de reclamar que el Gobierno desarrolle estas modalidades de jubilación ya existentes en el sector privado.
Pese a que el secretario general de la Federación de Servicios de la Administración Pública de CC OO, Miguel Segarra, aseguró que la dirección de su sindicato 'apoya totalmente esta demanda', esto no parece ser así.
De hecho, al término de dicha rueda de prensa, el secretario de Política Institucional y responsable de pensiones de la dirección confederal de CC OO, Salvador Bangueses, visiblemente contrariado, desautorizó esta e demanda de su federación de servicios públicos. 'La confederación del sindicato no ampara estas reivindicaciones, que son contradictorias con la política que viene practicando esta organización; atentan directamente contra los intereses del sistema de Seguridad Social y son profundamente injustas y extemporáneas'.
El secretario de organización de la Federación de Servicios Públicos de UGT, Rafael Espartero, aseguró no tener ningún problema con la dirección de su sindicato y así lo corroboraron posteriormente a este periódico fuentes de la dirección confederal. Por lo tanto, la cúpula de UGT sí apoya la regulación de estas jubilaciones en contra de la dirección de CC OO.
Los sindicatos del sector público aseguran que se limitan a exigir el derecho a la jubilación anticipada que se reconoce en el artículo 67 del Estatuto de la Función Pública. Aunque dicho texto admite este derecho 'con carácter excepcional'.
En cualquier caso, esta división entre ambas cúpulas sindicales se da también a la hora de defender la jubilación a los 60 años en el sector de la construcción.