El petróleo sube tres veces más que la gasolina
El precio de la gasolina alcanzó un nuevo récord la semana pasada. Y no será el último del año. El precio en las gasolineras ha crecido tres veces menos que el precio del crudo, por lo que aún no ha repercutido todo el encarecimiento que acumula el barril de petróleo hasta noviembre (un 58,1%).
Malas noticias para los conductores. En la víspera del puente de la Constitución y de las navidades, cuando está previsto que se realicen más de 18 millones de desplazamientos, el precio de los combustibles ha alcanzado un nuevo récord en doce meses por el fuerte encarecimiento del barril del petróleo. El precio del litro de gasolina sin plomo ha llegado a 1,105 euros y el de gasóleo ha vuelto a superar la barrera psicológica del euro.
Y éste es tan sólo el principio de las subidas, ya que el precio de los carburantes en los mercados internacionales (el denominado precio en origen) ha crecido el doble de lo que lo ha hecho en los surtidores, lo que parece apuntar a que todavía no se ha repercutido todo el encarecimiento del barril de petróleo a los consumidores.
Así, el precio que pagan las petroleras por los combustibles ya refinados en el mercado mayorista ha crecido en lo que va de año un 45,1% en el caso de la gasolina 95 sin plomo, mientras que para el gasóleo ha subido un 55,2%. Unos incrementos mucho más fuertes que los que se han registrado hasta el momento en el surtidor.
El precio de venta al público de un litro de gasolina sin plomo se ha encarecido un 15,3%, mientras que el de gasóleo lo ha hecho un 20,1%. Si finalmente se trasladan todas esas subidas en origen, los conductores acabarán pagando más de 1,25 euros por el litro de gasolina e incluso el litro del gasóleo podría colocarse por encima del de la gasolina.
El hecho de que el precio del gasóleo se haya acelerado más que el de la gasolina está justificado por el aumento de la demanda como consecuencia de la dieselización del parque automovilístico en España. En 2006, el 71% de los coches que se matricularon consumía gasóleo y de los 22,7 millones de vehículos que hay matriculados en España, 9,2 funcionan con motor diésel, según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Coches (ANFAC). Esta fiebre por el diésel ha provocado un fuerte desajuste en las existencias de combustibles en España, ya que las petroleras exportan gasolina sin plomo y deben importar gasóleo.
Dónde está la más barata
Este desajuste es el que ha provocado la oposición frontal de las petroleras a producir bioetanol, ya que este nuevo combustible les supondría una nueva reducción en sus cuotas de ventas. De hecho, ya están exportando al extranjero parte de sus existencias. Sin embargo, se han mostrado dispuestas a producir biodiésel, lo que podría servir para reducir el déficit español en esta materia.
Consciente del encarecimiento de la gasolina y de la necesidad de mejorar la transparencia en el sector, el Ministerio de Industria presentó la semana pasada una nueva herramienta a través de la que se pueden localizar las estaciones de servicio donde se dispensan la gasolina o el gasóleo más barato. El usuario que quiera realizar esa búsqueda debe entrar en la siguiente dirección: (http://geoportal.mityc.es/hidrocarburos/eess/) y orientarla bien por provincias o por recorridos en función de las comunidades autónomas por las que vaya a circular.
En la gasolina sin plomo, las diferencias entre la comunidad más barata (Navarra) y la más cara (Comunidad Valenciana) son muy fuertes. En la estación más económica de Navarra, situada en Tudela, se puede comprar un litro de gasolina por 1,036 euros, mientras que en la más cara, localizada en Enguera (Comunidad Valenciana), el precio sube a 1,193 euros. La diferencia es de 0,214 euros por litro, casi diez euros si se llena el depósito.
Algo similar ocurre con el gasóleo, donde la estación más barata se encuentra en Burlada (Navarra), con un precio de 0,979 euros, mientras que la más cara está en Picón (Ciudad Real), a 1,010 euros el litro.
Los márgenes brutos de las petroleras bajan un 33% en el gasóleo
Las empresas petroleras, que tradicionalmente son acusadas de lucrarse con las subidas del precio del petróleo, siempre se han mostrado partidarias de que el precio del crudo no sufra oscilaciones fuertes porque un petróleo caro les estrecha sus beneficios brutos.Así se demuestra si se compara la evolución de los márgenes brutos de las petroleras en España, que surgen de restar a los precios antes de impuestos (PAI) las cotizaciones que alcanzan los combustibles en los mercados internacionales. Estos márgenes se han estrechado especialmente en el caso del gasóleo durante este año. A principios de enero, las petroleras obtenían un beneficio de 0,124 euros por cada litro de gasolina sin plomo 95, mientras que a finales de noviembre, el último dato disponible, ese margen se ha visto reducido a 0,117 euros, lo que supone una merma del 5,98%.Mucho más fuerte ha sido el descenso en el caso del gasoil, en el que las empresas obtenían 0,124 euros por litro y a finales de noviembre había bajado un 33,3%, hasta situarse en 0,093 euros.A estos márgenes brutos, habría que descontar los gastos de transporte o comercialización, entre otros, que deben aplicar las petroleras.