PSOE y PP prometen eliminar el impuesto de patrimonio
Zapatero anuncia su supresión al inicio de la legislatura y Rajoy recuerda que ya la había propuesto.
Gane quien gane las elecciones del 9 de marzo, el impuesto que grava la acumulación de capital en manos de las personas dejará de existir el próximo año. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció ayer que la supresión del impuesto sobre el patrimonio será una de las primeras iniciativas legislativas del próximo periodo de sesiones. Lo hizo en la inauguración de una jornada sobre economía española organizada por la revista The Economist, foro en el que el líder de la oposición, Mariano Rajoy, recordó que su partido ya había propuesto esta supresión a principios del verano.
En los últimos meses, numerosas comunidades autónomas (responsables de su gestión) han anunciado iniciativas para reducir los tipos de gravamen, pero, atendiendo a criterios 'racionales', el Gobierno ha optado por cortar por lo sano. 'El de patrimonio se ha convertido en un impuesto para las clases medias, ya que las altas encuentran fáciles mecanismos de elusión', llegó a decir Zapatero. El presidente afirmó que el Gobierno viene ponderando desde hace meses los teóricos beneficios del tributo, como su capacidad recaudatoria (1.400 millones de euros en 2006) o su carácter de impuesto censal, que sirve para aflorar rentas gravables por otros medios. Ni uno ni otro parecen haber sido suficientes.
Fuentes de Moncloa explicaron a Cinco Días que la decisión busca mejorar la eficiencia del sistema impositivo: 'No tiene ningún sentido gravar el ahorro. Además, se daba el absurdo de que una persona que acaba de comprar un piso puede pagar el doble que su vecino de escalera, sólo porque éste lo compró tiempo atrás'. Las mismas fuentes afirman que, de momento, no habrá decisiones similares sobre el impuesto de sucesiones y donaciones, otro tributo cuestionado en los últimos tiempos. 'Ahí no hay tanto consenso, porque hay quien sigue defendiendo su potencial redistributivo, aunque la tendencia apunta a su futura desaparición', añaden.
Zapatero explicó que, en el marco del próximo modelo de financiación autonómica, se establecerán los mecanismos por los que el Gobierno compensará a las comunidades por la pérdida recaudatoria que supondrá la eliminación del impuesto de patrimonio.
Desde Moncloa no aclaran cómo se realizará la compensación, aunque recuerdan que el impacto recaudatorio será 'muy moderado'. La supresión del impuesto en 2008 supondrá que ése será el último año en que se recaude, con base a los patrimonios vigentes en ejercicio actual. Las mismas fuentes señalan que la supresión de este tributo es 'un paso hacia la modernidad, porque ninguna economía moderna quiere penalizar el ahorro'. Los discursos respecto a que el impuesto recae sobre los ricos 'son incorrectos, porque en España no hay un millón de ricos. Una persona que ha ahorrado y ha ido cambiando de vivienda a precios cada vez más elevados lo paga, incluso aunque ésa sea su única riqueza'.
Según Zapatero, España se unirá así 'a la mayoría de países de nuestro entorno', y 'se garantizará la igualdad entre los españoles'. El presidente recordó que, en su día, el de patrimonio se creó como un impuesto excepcional. 'Hoy la Agencia Tributaria tiene todos los elementos para conocer la renta de los ciudadanos', sentenció.
Zapatero aprovechó su intervención para glosar algunos de los éxitos recientes en materia económica, como la reducción del desempleo o de la deuda pública. Además, destacó el nivel de inversión, que, con un 31% del producto interior bruto, 'sólo se compara con el de Japón antes de la primera crisis del petróleo'. También elogió la fortaleza de las empresas, citando en especial a las líderes en energías alternativas: 'Es la primera vez que España está a la cabeza ante un cambio de modelo económico global', afirmó, en referencia a la lucha contra el cambio climático.
Respecto a la crisis de liquidez, explicó que se está transformando en una 'crisis de solvencia localizada', que afectaría sólo tangencialmente a España. Ayer, los bancos europeos sufrieron fuertes caídas en bolsa, con una media del 2,5%, pero los españoles estuvieron entre los que mejor se comportaron.
Rajoy reclama la paternidad de la idea
Durante su intervención, algunas horas más tarde, Rajoy recordó que ya había propuesto en junio la supresión de el impuesto sobre el patrimonio. 'Celebro que algunos vayan hacia el sentido común, y espero que con el tiempo hagan lo mismo con el de sucesiones', ironizó. El líder de la oposición recordó su intención de eximir del IRPF a las rentas inferiores a 16.000 euros, pero eludió responder a una pregunta directa sobre el coste recaudatorio de la medida (el Gobierno lo sitúa en 25.000 millones de euros).
Rajoy, aseguró que, si su partido gana las elecciones, aprobará una Ley de Unidad de Mercado y creará una Comisión Nacional de Unidad de Mercado que sirvan 'para garantizar la libertad económica en toda España'. Además, anticipó que creará una Agencia de Prospección del Empleo y las Cualificaciones que revise el catálogo de actividades que crean más empleo y los requisitos formativos que demandan.
Rajoy resumió su oferta electoral en dos puntos principales: 'recuperar los consensos' en materia territorial y lograr 'que la gente viva mejor'.
Contrapunto del PP. Unidad del mercado y flexibilidad laboral
Estabilidad fiscal . El líder de la oposición anunció un 'refuerzo' de la Ley Presupuestaria para garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas, incluyendo los compromisos futuros en las pensiones. Si la economía crece, el gasto público no podrá superar al PIB nominal. Se establecerá un programa de reformas para mejorar la eficiencia de los mercados y limitar las barreras de entrada y salida. Un grupo de expertos elaborará propuestas en materia económica y fiscal 'que contribuyan a la protección del medio ambiente'.Unidad de mercado. Rajoy explicó que una de sus prioridades será 'recuperar la unidad de mercado', dada la proliferación de normas 'especialmente en el ámbito autonómico, que limitan la competencia y aumentan los costes de transacción'. Fuentes del PP explican que se pretende evitar casos como el proteccionismo frente a empresas de otra comunidad autónoma. Para ello, se aprobaría una Ley de Unidad de Mercado, incluyendo una Comisión Nacional de Unidad de Mercado que actuaría como árbitro en caso de disputa.Flexibilidad laboral. El Partido Popular incidirá en su programa en la flexibilización del mercado laboral. Para ello, propondrá a los agentes sociales una reforma del Estatuto de los Trabajadores que incentive el empleo a tiempo parcial, la conciliación, la formación y la prolongación voluntaria del periodo activo. Además, creará una Agencia de Prospección del Empleo y las Cualificaciones, para determinar las actividades más demandadas en el mundo empresarial y sus requisitos formativos.Inversiones. El programa del Partido Popular incluirá medidas de fomento de la inversión en capital humano y tecnológico, entre ellas el despliegue de redes de nueva generación, en colaboración con la iniciativa privada. En materia de infraestructuras, el PP propondrá algunas medidas ya incluidas en el vigente Plan Estatal de Infraestructuras y Transportes, como la conexión de todas las provincias por alta velocidad ferroviaria, la conexión a través de plataformas logísticas o el mallado de carreteras de gran capacidad.Energía. Rajoy afirmó ayer que la energía será un capítulo clave en el programa popular. Se buscará reducir la dependencia de los hidrocarburos, apostando por energías renovables. Rajoy se refirió a la cuestión de los 'campeones nacionales', puesta de relieve con la opa de Endesa. 'A mí, que soy de Pontevedra, me gustaría que las empresas fueran de Pontevedra, pero asumo que eso hoy en día no es realista. Creo que los campeones deben serlo en competitividad'.