Limpieza ornamental en Nortel
Siempre ha trabajado en el sector de las telecomunicaciones y de las tecnologías. Es por ello que Fernando Valdivielso, nacido en Burgos hace 39 años, director general de Nortel Iberia, necesita estar arropado por todo su equipo, y conseguir que esté motivado con los objetivos de la compañía, con el cliente y con la actividad comercial.
El espacio en el que trabaja, ubicado en un parque tecnológico al norte de Madrid con un pequeño estanque en el centro, es austero, pulcro y limpio de todo ornamento. Este ejecutivo no necesita de ningún elemento decorativo para poder desarrollar su actividad. Lo que sí requiere es que el despacho tenga luz y vistas. Valdivielso tiene unos amplios ventanales, con los que de vez en cuando se distrae de sus maratonianas jornadas. Trabaja desde las ocho de la mañana hasta bien pasada la medianoche, debido a las exigencias de sus clientes que trabajan con América Latina. Conviene advertir que Fernando Valdivielso compagina la dirección de las operaciones de la compañía en España y Portugal con la dirección internacional para las operaciones de Nortel con Telefónica, responsabilidad que venía ocupando desde su incorporación a la organización en 2006.
A pesar del poco tiempo libre que le queda, asegura que Nortel es 'una empresa muy flexible en cuanto a horarios, que pretende que todos sus empleados concilien al máximo'. Su caso es un poco diferente.
'He puesto en valor la motivación con un sentimiento de entusiasmo en nuestro equipo'
Hace cuatro meses que tomó las riendas de la compañía y sobre él pesa una gran responsabilidad. Sin embargo, hace todo lo posible para disfrutar de su familia, de su mujer y de sus tres hijos. 'Me voy a casa a media tarde y puedo estar con ellos. Cuando están dormidos atiendo el trabajo que me queda pendiente. Es una manera de compatibilizar', señala Valdivielso.
Si reflexiona, asegura que pasa pocas horas en el despacho. Una semana al mes está de viaje fuera de la oficina, también pasa bastante tiempo viendo a los clientes. No le importa en exceso toda esta dedicación. Le compensa, ya que asegura que lo más importante en la carrera de un profesional es trabajar en 'una compañía que tiene un claro compromiso con los clientes y una estrategia de futuro'. Porque lo que hace diferente a una empresa del sector en el que trabaja es su 'liderazgo tecnológico y la motivación del equipo de profesionales'.
Fernando Valdivielso es ingeniero en Telecomunicaciones por la Universidad Politécnica de Madrid y cuenta con un máster en Dirección de Empresas por el Instituto de Empresa. Ha completado su formación en marketing y gestión por Oxford Said Business School y Harvard Business School. Previamente a su incorporación a Nortel, fue director de la división de telecomunicaciones de Samsung Electronics, director general en Lucent Technologies y consultor de planificación estratégica en AT&T.
Sobre lo que la alta dirección vio en él para confiarle el puesto que ahora ocupa, asegura que ha sido la alegría que ha aportado al equipo de profesionales. 'He puesto en valor la motivación con un sentimiento de entusiasmo en todos los que trabajan en la empresa, sin olvidar que por las venas de la compañía corre la innovación y que eso es lo que aporta valor a los clientes'. En su opinión, para ejercer un puesto directivo hay que desarrollar un 80% de liderazgo y de adaptación a los cambios, destreza que él tiene bien desarrollada. 'Precisamente, las telecomunicaciones han sido el sector que han generado más cambios, sobre todo en la forma en la que nos hemos relacionado'.
Algo que también ha tenido que aprender sobre la marcha es a diferenciar lo importante de lo urgente. 'Cuando ocupas un puesto de este nivel tienes que marcar prioridades'. Asegura que sólo tiene un privilegio sobre el resto del equipo directivo: las ventanas que dan al exterior. 'Hemos dado prioridad a los empleados. Yo las tengo por imagen hacia los clientes'.
Los regalos de los hijos le arropan
Lo peor de su puesto es el poco tiempo que pasa con sus tres hijos, dos niñas y un pequeño de un año. Y para tenerlos siempre presente se ha llevado al despacho lo típicos regalos que éstos le han hecho en el colegio con motivo del Día del Padre. 'Me hace mucha ilusión tener sus trabajos manuales. Es algo muy tierno que me encanta', afirma este ejecutivo.También tiene recuerdos de sus trabajos para AT&T y Telefónica. Entre los libros que guarda en una estantería se encuentra el que escribió el presidente de la agencia de publicidad Tapsa, Fernando Ocaña, 20 claves para hacer equipo.A Fernando Valdivielso le gusta jugar al pádel. Pocas aficiones puede tener más. 'Entre los viajes, la familia y el trabajo me queda muy poco tiempo para mis aficiones personales. No me puedo permitir el lujo de tener otras ocupaciones, al margen de mis obligaciones laborales y personales'.Hablando con este ejecutivo podemos llegar a la conclusión que se dedica a lo que verdaderamente le gusta. Y está encantado, sobre todo, de liderar un proyecto con gente, cuya media de edad es 35 años, 'porque es mucho más fácil emprender nuevos proyectos y adaptarnos a todos los cambios, que si tenemos una estructura más rígida'.