Kynetia, en blanco y negro
Jorge Pascual trabaja en un espacio de diseño con amplitud de vistas y de miras
El espacio en el que trabaja Jorge Pascual impone. Por diseño, amplitud y vistas sobre Madrid. El director general de la empresa de arquitectura y desarrollo de software Kynetia, segoviano de 36 años, disfruta de un generoso e innovador despacho, en la zona de Azca en Madrid. Sorprende que todas las paredes y mobiliario sean lacadas en negro, en contraste con sillas y sillones de color blanco. Cuenta este ejecutivo que en un principio hubo dudas sobre la decoración, a la que dedicaron toda su atención. 'Se trata de una tarjeta de presentación para nuestros clientes y hay que cuidar todo'. Acaba de estrenarlo y se nota porque está entusiasmado con su puesto y con el proyecto que tiene entre manos. 'Estamos viviendo un momento apasionante porque el sector vuelve a estar en todo su esplendor, y nosotros tenemos un plan de crecimiento agresivo'. Para ello, en Kynetia, empresa de origen español, ha rediseñado su modelo de negocio mirando hacia el exterior, donde ya desarrolla su actividad, donde ya está presente en el mercado europeo y americano. 'España tiene una posición interesante en el mercado global. Se dice que no competimos en precio ni en innovación, pero jugamos un papel importante en el sector servicios. Es nuestro valor añadido', asegura.
Y explica que otro punto fuerte que juega a favor de España es la estabilidad del país. 'Nosotros hacemos ingeniería de software, como también se hace en India, pero nuestra gran ventaja es que tenemos un marco jurídico y económico estable, y una gran experiencia en recursos humanos'.
Según Pascual, el mercado nacional tiene un techo y cada vez es más difícil crecer. 'Pero fuera tenemos todo el mercado para ser competitivos, con precios baratos, no tanto como en India, pero con un escenario más estable'. Europa es una de las zonas, junto con América Latina, más apetecible para competir.
Pero además de mercado, Jorge Pascual necesita tener a un buen equipo de profesionales. En estos momentos la plantilla es de medio centenar de personas. 'Tiene mucho mérito que muchos hayan dejado otros sectores para venir a trabajar a un negocio con riesgos. El secreto creo que está en que tenemos potencial y un proyecto muy atractivo, sin miedo a emprender y a tirar hacia adelante', afirma este ejecutivo, que se confiesa un 'evangelizador total del negocio'. Se lo cree. Y no tiene reparo en referirse al pasado del sector, sobre todo a esa 'época oscura, que enrareció al mercado con la burbuja de 2000'. Sin embargo, el panorama que se presenta por delante, afirma que es alentador. 'Todo eso ha cambiado. La industria del software está naciendo y todo ello es muy complicado porque las necesidades de las organizaciones son cada vez más dinámicas, pero vamos hacia una etapa de consolidación brutal'.
Durante la entrevista repite constantemente la palabra software. 'Soy un enamorado de este término. El artefacto más complicado de toda la ingeniería es el software'. Pero que nadie piense que todo es tecnología en la vida de este ejecutivo porque asegura que le encanta trabajar con personas. 'Todo el negocio, dentro y fuera de las compañías, se sustenta sobre las personas. Sin ellas no hay negocio, ni industrialización, ni máquinas. Un negocio no es más que gestionar las relaciones entre las personas'.
Jorge Pascual es ingeniero industrial y ha tenido que formarse en los temas de gestión empresarial. 'Es difícil porque el dinamismo es el componente que caracteriza hoy día a las empresas. Todo cambia de un día para otro, pero me divierte esta faceta'. Lo que no puede soportar, también porque es la base del negocio, son los problemas con los clientes. 'Pero todo conflicto es un reto, es un juego con diferentes jugadores'. Este directivo nunca olvida algo que escuchó al presidente de Apple, Steve Jobs, que cada mañana hay que enfrentarse al espejo para filtrar a la muerte. 'Si eres capaz de hacer eso, todo lo demás es gestionable. El gran reto que tenemos, hoy día, los ejecutivos es saber enfrentarnos a las dificultades'. De los problemas, asegura que hay que salir reforzado. Siguiendo a Keynes, afirma que es necesario trabajar en época de bonanza para tener cobertura cuando llegue la crisis. 'La gestión del día a día te puede romper la perspectiva, pero hay que anticiparse a los malos momentos'.
Pascual se siente eufórico por todo lo que está ocurriendo alrededor de la industria del software. 'Es algo que no es tangible, es difícil de ver, pero están ocurriendo cosas muy interesantes. Antes Microsoft tenía una posición indiscutible y no había forma de competir con este gigante. Ahora hay alternativas y Microsoft ha empezado a ser cuestionado. Todo lo que está pasando abre grandes oportunidades'.
A solas con su ordenador
Es su gran compañero de fatigas. Jorge Pascual no entiende de papeles. No le gusta tenerlos encima de la mesa. 'Todo lo tengo en digital. Ni las cuentas las veo en papel, las prefiero en Excel', reconoce este ejecutivo, que ha sido director técnico de contenidos de Terra en Estados Unidos, cargo que abandonó en 1999 para incorporarse a Kynetia. Acaban de ampliar el espacio de la oficina. Le gustan los espacios grandes, 'los pequeños parecen cubículos', en los que se pueda pensar y disfrutar del trabajo. 'Cada uno necesitamos nuestro espacio desde donde podamos aportar nuestra creatividad'. Es perfeccionista y peca de controlador. Trabaja muchas horas porque no tiene la sensación de trabajar. 'Hago lo que me gusta y no miro las horas que le dedico, que son todas'. Va siempre con su ordenador portátil, y considera que su vida personal y profesional es lo mismo. 'Me gusta leer porque tengo curiosidad por conocer cosas, pero soy un hombre pegado a un ordenador'.