El chivo expiatorio chino
Después de semanas de quejas sobre la debilidad del dólar, los ministros de Finanzas de la zona euro han encontrado otro chivo expiatorio al que culpar por sus problemas económicos: el yuan (...). Traducción: si el yuan se encarece, las exportaciones de China se reducirán, y las exportaciones de la zona euro se incrementarán.
Pero la economía global no funciona como la ecuación estática de un libro de texto. Las exportaciones baratas chinas han incrementado el poder de compra de los consumidores europeos a través de bienes asequibles (...). Mientras tanto, los exportadores europeos han explotado un gigantesco nuevo mercado, cortesía de una clase consumidora en expansión de China. Entre mayo y julio de este año, las exportaciones europeas a China se incrementaron alrededor de un 17% (...).
La verdad es que ni la fortaleza del euro ni la moneda china son realmente el problema aquí (...). Mientras los líderes continentales tienen poco que hacer para rebajar el euro, sí tienen en su poder arreglar lo que realmente importa: los impuestos y la política regulatoria. Y es que hay países que aplican reformas (Alemania) y no montan un escándalo, mientras otros que no lo hacen así (Francia).