ABN completa la venta de Lasalle a Bank of America
ABN Amro completó ayer la venta de su filial estadounidense Lasalle a Bank of America por 21.000 millones de dólares (14.760 millones de euros), que se pagarán en efectivo. Esta venta forma parte del acuerdo de fusión entre el holandés y Barclays.
Bank of America adquiere el negocio de banca minorista y comercial en Norteamérica de la hasta ahora filial de ABN Amro. En la venta, no se incluye los activos de clientes y mercados globales. El grupo holandés, que esta semana cambiará de manos, obtiene con esta operación unas plusvalías de 7.300 millones de euros, que se imputarán a los resultados del cuarto trimestre.
Pese a la venta de Lasalle, pieza inicialmente clave en la oferta presentada por Royal Bank of Scotland, Santander y Fortis sobre ABN, este trío bancario se quedará con los fondos de dicha operación en sus arcas, si finalmente consigue salir exitoso de su opa, cuyo periodo de aceptación se resuelve el 5 de octubre, un día después de la de Barclays.
Santander y sus socios intentaron que su oferta incluyera también las actividades de Lasalle, en el que estaba interesado Royal, pero tras un largo tira y afloja, acabó renunciando.
Mientras, la opinión pública holandesa se muestra decepcionada y preocupada por la posible compra de ABN Amro por parte de Santander y sus socios, en particular en lo referente a la división de los activos de la entidad holandesa entre los tres bancos, según publica diario británico Financial Times.
Todo apunta a que será el consorcio el que se declare vencedor de la puja, ya que la oferta de Barclays ha perdido gran parte de su valor al ser en gran medida en acciones. Los títulos del banco británico han caído en las últimas semanas a causa de las turbulencias financieras y su oferta asciende actualmente a cerca de 62.000 millones de euros, frente a los 67.500 que habían previsto.
El precio del consorcio es considerablemente mayor, de 71.000 millones de euros, y tras obtener todas las autorizaciones pertinentes a la operación con excepción del visto bueno de la CE respecto a la realizada por Fortis, sobre la que se pronunciará el día 3 de octubre.
Pero, a pesar de la sustancial ventaja económica del consorcio, los holandeses muestran su recelo por las intenciones de los bancos de dividirse los activos de una marca histórica sobre la que existe lazos emocionales.
Un banco holandés con 183 años de historia
ABN Amro inició su andadura en 1824. Tiene sucursales en la mayoría de las calles del país y su nombre está impreso en las camisetas del equipo Ajax de Ámsterdam. El fuerte arraigo en Holanda ha provocado que numerosos grupos de opinión del país se muestran contrarios a la espiral de adquisiciones de grandes empresas nacionales por parte de extranjeros. Por su parte, desde el Gobierno holandés, el portavoz del ministro de Finanzas holandés, Wouter Bos, se desmarcó de la polémica. 'Las grandes opa inflaman la opinión pública, pero muchas compañías holandesas han estado en manos de extranjeros durante años. No se trata de un fenómeno nuevo', destacó.