Gas Natural compra Italmeco por 32,2 millones
Gas Natural cerró ayer en Milán la adquisición del grupo gasista italiano Italmeco por 32,2 millones de euros. Esta operación le permitirá ampliar a 31 nuevos municipios su área de distribución. Gracias a esta compra, la compañía española alcanzará los 350.000 clientes en el país transalpino, según el comunicado remitido ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La empresa adquirida, que opera en cuatro regiones del centro y sur de Italia, es la cuarta cuyo control asume en Italia el grupo presidido por Salvador Gabarró. Gas Natural entró en Italia en el año 2002, donde orienta su actividad especialmente a la distribución y comercialización de gas.
Italmeco opera en 31 municipios de las regiones de Basilicata, Calabria, Campania y Lazio, y cuenta con una cartera de 15.500 clientes, así como capacidad para alcanzar los 30.400 clientes en un periodo de ocho años.
Hasta ahora, el grupo era propiedad de Costruzioni Generali Bonatti y cuenta con una concesión para distribuir gas natural en 13 municipios de la región del Lazio, 11 municipios de Calabria, cinco de Campania y dos en Basilicata.
Gas Natural asegura que durante 2007 Italmeco ha realizado un importante esfuerzo inversor para llevar el suministro a 11 nuevos municipios, lo que le ha permitido pasar de 6.500 clientes con los que cerró 2006 hasta los 15.500 con los que cuenta actualmente y que suponen unas ventas anuales de 78,43 gigavatios hora (GWh).
Las inversiones de Gas Natural en el país transalpino alcanzaron los 70 millones de euros durante 2006 y consistieron sobre todo el desarrollo de redes de distribución. Una inversión que le ha permitido alcanzar los 36.000 en Italia.
La filial a través de la que realiza las tareas de comercialización en este país es Gas Natural Vendita. En 2004, entró en el negocio regulado de la distribución tras comprar activos de las sociedades Nettis, Brancato y Smedigas.
Subastas eléctricas
El Ministerio de Industria afirmó ayer que las subastas de emisiones primarias de energía suponen un paso más en la política de fomento de la competencia en los mercados de electricidad y se amplía el abanico de posibilidades de contratación de la energía.