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Construcción

ACS quiere un giro en la alemana Hochtief

Traspiés de la constructora alemana Hochtief, en la que ACS es accionista de control desde marzo. Cerró el semestre con una caída del 56% en el beneficio por la subida del coste de los materiales de construcción y lo acusó en Bolsa. ACS quiere imponer un giro para centrarla en actividades más rentables, como los aeropuertos.

Mal comienzo de la participada de ACS. Las primeras cuentas desde que el grupo español entró en el capital el pasado mes de marzo ha reflejado la debilidad de una constructora que aunque hasta ahora era la número uno mundial por ventas, gana mucho menos que otras competidoras con menos ingresos, por ejemplo, Ferrovial o Acciona (ACS facturó 10.409 millones y ganó 1.010 millones). El beneficio de Hochtief cayó un 56%, hasta 13,8 millones.

El motivo principal fue el mal comportamiento de la división europea de construcción, que registra pérdidas y acabará el año con 120 millones en negativo. Aunque la previsión del consejero delegado, Herbert Lütkestratkötter, es poder compensarlo con otras áreas.

Tras el mal semestre, la acción de la germana cayó un 1,59% (69,20 euros). ACS también registró un retroceso del 1,14% (42,51 euros), pero menor que el de otras rivales nacionales como Acciona o Sacyr.

La empresa que preside Florentino Pérez se convirtió en primer accionista en marzo tras comprar el 25% a la familia Von Finck. Ha desembarcado en el consejo y ha visto cómo, tras su entrada, el magnate ruso Oleg Deripaska ha reforzado su posición hasta el 10%. Como accionista de control, ACS ya ha empezado a dejar huella en la alemana. Quiere que reduzca peso en la construcción en Alemania y se centre en actividades más rentables en las que también tiene un fuerte peso internacional, como los aeropuertos. Así lo reflejaron ayer las declaraciones del consejero delegado, que anunció que el foco también se trasladará al negocio inmobiliario, que en Europa del Este se perfila como un filón.

En aeropuertos, Hochtief es uno de los principales gestores de Europa. Controla los de Hamburgo, Düsseldorf, participa en el aeródromo de Atenas, de Sidney y de Tirana. Además, acaba de comprar el 75% del aeropuerto de Budapest -que el gestor británico BAA vendió por orden de su propietario, Ferrovial-, lo que le da entrada al mercado de Europa oriental. Otros dos pilares de la alemana son la filial australiana Leighton, primera ingeniería del país, y la estadounidense Turner.

Aliarse al magnate

Rusia es uno de los mercados que Hochtief quiere explorar más a fondo. La participada de ACS negocia con Basic Element, el holding del millonario ruso y segundo accionista de la alemana Oleg Deripaska, para una posible alianza, informa Bloomberg.

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