El mueble artesanal de madera de olivo sube a primera división
Empresarios de Córdoba y la Junta de Andalucía se unen para dotar al sector de diseño e innovación.
Los muebles hechos de madera de olivo no tienen nada que envidiar a los elaborados con las clásicas maderas nobles, como la de roble, a pesar de que tradicionalmente se ha utilizado para amueblar las segundas residencias de carácter rústico o para las bodegas. Esto es lo que defienden en la localidad cordobesa de Castro del Río, donde se trabaja este tipo de madera desde hace más de 120 años de manera artesanal.
A pesar de esta larga tradición, muchos no conocen esta actividad. Por ello han decidido tomar medidas para promocionar este trabajo y aprovechar su potencial turístico. Para ello, el Consorcio Escuela de la Madera de la Junta de Andalucía (Cemer) y la Asociación de Artesanos de la Madera del Olivo de Castro del Río han firmado un convenio de colaboración que 'supondrá un importante beneficio para el sector en la provincia de Córdoba, en particular en lo que se refiere a la madera de olivo, y como sinergia para el resto de la comunidad autónoma', aseguran fuentes del Cemer.
'El objetivo del convenio es incorporar nuevas técnicas de diseño, darle otro enfoque a nuestros muebles para que puedan introducirse en las casas normales, aunque todo ello sin incorporar demasiada tecnología, ya que se trata de un producto artesanal y no queremos perder el valor añadido que ello supone', señala el presidente de la asociación, Enrique Fernández. Este acuerdo contribuirá a la creación y experimentación de métodos de trabajo innovadores, especialmente los relacionados con el control de calidad de la fabricación y nuevas técnicas de diseño, muebles, instalaciones o decoración, entre otros. Ambas instituciones deberán colaborar en el impulso y promoción de actividades desarrolladas con el fomento del I+D y proponer una transferencia de resultados a las pymes del sector de la madera y el mueble.
Para que todo esto pueda hacerse realidad, el acuerdo entre empresarios del sector y la Junta recoge la necesidad de formación de los profesionales 'con el fin de facilitar su incorporación a las distintas empresas del sector, así como contribuir a la especialización y actualización de los profesionales de la madera en ejercicio potenciando el desarrollo del sector', afirman en el Cemer.
Para la mayoría de la sociedad es desconocida la calidad de la madera de olivo y sus posibles usos. De hecho, su densidad es superior a la del roble, lo que hace que 'dure toda la vida', añade Fernández. 'Es una madera poco porosa, a la que no atacan la polilla y la carcoma y, además, los muebles de Castro del Río -el único pueblo del mundo que trabaja con este material- están hechos a mano, por lo que sus posibilidades en el mercado son muchas', destaca.
Esta potenciación del sector puede contribuir al turismo en esta zona de la provincia cordobesa. 'Se puede aprovechar el turismo rural y poner en marcha una ruta artesanal, que incluya la visita a fábricas y que cuente con un museo sobre su historia', insiste Fernández. Para los empresarios de Castro del Río es fundamental el respeto al entorno, por lo que sus procesos de producción son sostenibles. De este modo, se utiliza la madera procedente de la poda, con lo que no se tala indiscriminadamente.