La CE alerta sobre el riesgo de colapso de internet y telefonía
Las redes de telecomunicaciones europeas presentan un alarmante estado de vulnerabilidad, según un estudio encargado por la CE. Los expertos recomiendan que las compañías aumenten la capacidad de la red para responder a una emergencia, pero piden que la inversión se haga con dinero público.
La comisaria europea de Sociedad de la Información, Viviane Reding, recordó ayer con motivo de la presentación de este estudio independiente, que 'las infraestructuras de comunicación e información son el sistema nervioso de nuestra sociedad moderna'.
A pesar del carácter vital de esas infraestructuras, el informe, cuyo copyright pertenece a Alcatel-Lucent, alerta de que 'el esfuerzo que se hace en prepararlas para un desastre es a menudo insuficiente'.
Entre las carencias detectadas, sobresalen desde la posible insuficiencia de las redes de comunicación de emergencia hasta la creciente dependencia de tecnologías controladas por programas de software cuya seguridad no está garantizada.
Los expertos recomiendan una sensible mejoría de todos estos aspectos con el objetivo prioritario de 'responder a las situaciones de crisis tomando todas las decisiones que sea posible antes de que la crisis ocurra'.
La prevención, sin embargo, requerirá previsiblemente grandes inversiones en un sector como el de las telecomunicaciones, que ha sido casi completamente privatizado durante los últimos años. Por eso, la mayoría de la actuaciones requiere, según el informe, una estrecha alianza entre los Estados, las instituciones europeas y las empresas.
Entre las prioridades figura, por ejemplo, la necesidad de garantizar que tras un desastre natural o un ataque terrorista las autoridades y los organismos encargados de las tareas de rescate tengan garantizado un canal de comunicación.
'Esas situaciones de emergencia', advierten los expertos, 'suelen provocar un significativo aumento del tráfico en la red' en un momento en que, precisamente, 'ciertas comunicaciones son sencillamente esenciales para salvar vidas o bienes'.
Si el riesgo de que las redes tradicionales de telefonía se colapsen es muy alto, 'la gestión de unas redes de banda ancha limitadas plantea incluso mayores desafíos', subraya el informe.
El informe, que recoge claramente el sentir de las empresas del sector, reconoce la necesidad de mejorar la capacidad de esas infraestructuras. Pero advierte que dado que los gobiernos serán los principales usuarios de la red de emergencia, 'las fuerzas del mercado no entran en juego y no producen la motivación suficiente en el sector privado para invertir en su desarrollo, despliegue y mantenimiento'.
Los expertos liderados por Alcatel-Lucent recomiendan, por tanto, que 'los Estados miembros de la UE prevean los fondos necesarios para apoyar esa inversión'.
'Que no pase en la UE como en Asia'
'No me gustaría que Europa experimentase los enormes problemas que afrontó Asia en Navidad como consecuencia de un terremoto', indicó ayer Viviane Reding, comisaria europea de Sociedad de la Información. El 26 de diciembre, en efecto, millones de usuarios se quedaron sin conexión a internet ni posibilidad de realizar llamadas internacionales tras los daños sufridos por los cables submarinos de fibra óptica que unen Asia con EE UU. Tres semanas después, según los corresponsales en la zona, el acceso a la Red continúa siendo muy lento o imposible.Bruselas quiere que la Unión Europea 'adopte medidas protectoras' para evitar que un desastre natural como el acontecido en Asia o un ataque terrorista 'provoque un efecto dominó que derive en un enorme colapso tecnológico de las comunicaciones'.La Comisión Europea ya presentó en diciembre un proyecto de directiva para armonizar las medidas de protección que deberán cumplir las llamadas infraestructuras neurálgicas, que incluyen desde un aeropuerto a un servidor de internet.