La potencia de 'Chindia', yin y yang a la vez

Gracias a su tamaño y su fenomenal crecimiento económico, China juega sus cartas en la escena internacional. Mientras que el imperio del centro multiplica sus inversiones en África por sus necesidades en materias primas y extiende (...) su influencia en Latinoamérica, su presidente Hu Jintao ha conseguido, tras su histórica visita a India, una promesa de acuerdo de libre comercio con su gran vecino y rival (...), India. Se han comprometido a doblar el importe de sus intercambios comerciales hasta 2010 para alcanzar los 40.000 millones de dólares (...).

Es evidente que Pekín y Delhi sólo pueden salir ganando al mantener relaciones comerciales en vez de enfrentarse o ignorarse como lo han hecho los últimos 30 años. Son complementarios. India sirve de oficina del mundo y vende (...) sus servicios (...) y China se impone como la fábrica del mundo (...).

Pero aunque la emergencia de una potencia mundial en Asia parece inexorable, todavía le queda mucho camino por recorrer a esta Chindia (...), empezando por borrar sus diferencias políticas (...). Porque hay rivalidad y recelo (...). Para imponerse como superpotencias del siglo XXI, China e India deberán superar sus antagonismos siguiendo el principio de complementariedad del yin y del yang.