Merkel no excluye la entrada del Estado alemán en EADS
La canciller alemana, Angela Merkel, indicó ayer, tras una entrevista con el presidente francés Jacques Chirac, que no excluye la entrada del Estado alemán en el capital de EADS. España también estudia fórmulas para ampliar su peso en el grupo aeronáutico.
La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Jacques Chirac, no escatimaron ayer esfuerzos en mostrar su sólido apoyo político a la compañía Airbus, atrapada en una grave crisis por el retraso de su súper avión A-380, que costará hasta 4.800 millones de euros más de lo previsto en los próximos años y un doloroso ajuste de plantilla.
En la ya habitual puesta en escena del perfecto entendimiento entre París y Berlín, una sonriente Angela Merkel indicó ayer 'no excluir nada' en referencia a la entrada del Estado alemán en el capital del consorcio aeronáutico europeo EADS, matriz de Airbus. Recientemente miembros del Gobierno de España se han pronunciado a favor de incrementar el peso español en la compañía.
Alemania y Francia necesitan encontrar 'inversores fiables y a largo plazo que se sientan apegados a este proyecto' que encarna la cooperación industrial europea y 'el éxito de facto del tándem franco-alemán', añadió Merkel.
Merkel insistió en preservar la igualdad de influencia en EADS de Alemania y Francia
El capital de EADS está repartido entre el Estado francés (15%); la empresa gala Lagardère (7,5%); el grupo alemán DaimlerChrysler (22,5%) y la Sociedad Española de Participaciones Industriales, SEPI (5,48%).
Los insistentes rumores sobre la posible rebaja al 15% de la participación de la empresa germano-estadounidense en EADS también se han extendido a la posible compra de este capital por parte del Estado alemán. Ayer la canciller germana insistió en la necesidad de preservar la influencia de su país en la multinacional europea y mantener la exigencia de 'igualdad' de Francia y Alemania en el grupo. DaimlerChrysler ha reiterado su interés estratégico en el consorcio, al menos a corto plazo. Lagardère ya ha informado sobre la reducción de su anterior participación del 15% al 7,5%.
Confusión germana
La cacofonía reinó ayer por parte alemana, tras las declaraciones del alcalde de la ciudad de Hamburgo, Ole von Beust, según las cuales el Estado alemán entrará en el capital del consorcio europeo. Las palabras del alcalde alemán posiblemente fueran dirigidas con la intención de tranquilizar a los sindicatos de la planta de ensamblaje de esta ciudad, señalada como el 'eslabón débil' de la cadena de fabricación del gigante A-380.
Chirac enfatizó la necesidad de que el severo plan de ajuste Power 8 que el presidente de EADS y de Airbus, Louis Gallois, ha puesto en marcha, tenga un 'reparto armónico' entre las plantas de Hamburgo y de Toulouse.
Merkel descartó también un posible aumento de la participación de Rusia en EADS. El Banco de Comercio Exterior de Rusia (Vneshtorgbank o VTB) anunció el pasado mes que había comprado el 5,02% de las acciones de EADS.
Gallois calma temores en Hamburgo
Louis Gallois, copresidente de EADS y presidente de Airbus, visitó ayer la planta de ensamblaje de Hamburgo, en un intento de calmar la preocupación creciente en esta ciudad ante la inminente aplicación del plan de ajuste que irá acompañado de despidos. En su visita, Gallois insistió en que 'el esfuerzo de reducción de costes se repartirá de forma equitativa entre los cuatro países implicados, Francia, Alemania, Reino Unido y España', que albergan las fábricas de construcción de Airbus.La compañía se ha fijado como objetivo la reducción de un 30% en sus costes de administración y un alza de la productividad del 20% en sus diversas fábricas en los próximos cuatro años. Hamburgo representa la mayor fábrica de la empresa en Alemania, y donde se registraron los principales problemas que causaron el retraso en las entregas del A-380. No obstante, Gallois puntualizó no querer 'responsabilizar a una sola planta'.