Las regiones destinarán 2.800 millones a parques logísticos
La situación estratégica de la Península, cruce de caminos entre dos continentes y puerta de entrada a Latinoamérica, la convierten en un lugar idóneo para el desarrollo de la actividad logística y distribución. Las comunidades autónomas parecen haberse dado cuenta y pocas son las que se resisten a crear grandes centros logísticos con los que además potenciar sus comunicaciones. En total, durante 2007 se invertirán 2.800 millones de euros en conglomerados e infraestructuras logísticas, parte de los cuales serán aportados por cada autonomía.
La Junta de Aragón está a punto de concluir la segunda fase de su proyecto Plaza, que ha contado con una inversión de 360 millones de euros, aunque ya existen empresas, como Porcelanosa, que se encuentran funcionando. El parque aragonés, con una extensión de 1.200 hectáreas (12 millones de metros cuadrados), terminará con un total de 78 empresas instaladas y 12.000 puestos de trabajo nuevos.
Una de las primeras compañías en instalarse fue Inditex, cuyo director general por entonces y sobrino de Amancio Ortega, Juan Carlos Rodríguez Cebrián, decidió ubicar allí su plataforma para Europa, un centro que ahora completará con otros en Madrid y Palafolls.
Plaza se ha convertido en un referente para el resto de parques logísticos. La sociedad Plaza, en la que participa la Junta, el Ayuntamiento de Zaragoza, la CAI e Ibercaja, promueve algunos espacios para pequeñas empresas donde se pueden adquirir superficies menores de 5.000 metros, importe mínimo para comprar.
A Plaza se le unirá este año un fuerte competidor, Meco en Madrid. Esta plataforma recibirá una inversión de 300 millones de euros para construir uno de los centros logísticos más importantes de la península con una extensión de 12.000 metros, ampliables a otros 60.000 metros. La plataforma madrileña originará un empleo directo de 700 puestos, y la Comunidad de Madrid espera zanjar el proyecto en 2007.
Aprovechando la cercanía del puerto de Vigo, también la Xunta ha decidido apostar por el desarrollo logístico en la región. La Plataforma Salvaterra-As Neves, participada en un 10% por la Consellería de Vivienda, la Zona Franca de Vigo (25%) y la Autoridad Portuaria de Vigo (65%), cuenta con una extensión de 2,5 millones de metro que estarán finalizados en 2009, a los que se unirán otros 2 millones en 2011. La inversión para este proyecto ascenderá a 140 millones de euros y se crearán 5.000 empleos.
En el norte, el centro logístico de mayor envergadura será Arasur en Rivabellosa (Álava), gestionado por Abertis y Caja Vital, con el 39,5%, y en el que participan también el Gobierno Vasco y la Diputación de Álava, cada una con el 10%. El complejo, al que destinarán un total de 360 millones hasta 2013, tiene previsto convertirse en el centro logístico más importante del País Vasco, con 2 millones de metros cuadrados.
A estos centros se les unirá un proyecto, denominado Cylog, en Castilla y León, que supondrá la creación de toda una red logística entre las nueve provincias de la región. El ambicioso enclave supondrá un desembolso de 1.500 millones de euros durante el periodo 2006 y 2015. Esta red se extenderá por 7,3 millones de metros cuadrados y supondrá la creación de 3.000 puestos de trabajo directos.
En Andalucía, el parque de Antequera, ya en segunda fase, supondrá una inversión de 130 millones de euros, al que se unirá el de Huelva. Cataluña y Levante tampoco se quedarán atrás.
El primer proyecto entre España y Portugal
La Plataforma Logística del Suroeste Europeo, ubicada en Badajoz-Gaia, será la primera en la que los dos países colaborarán para ponerla en marcha. El enclave, que comprende una superficie inicial de 300 hectáreas, a las que en el futuro se unirán 100 más, tendrá un área de influencia directa de 10 millones de personas, comprendidas en el triángulo Madrid, Lisboa y Sevilla. El Ministerio de Vivienda, a través de la Sociedad Pública del Suelo (Sepes), participa con una inversión de 90 millones.El proyecto contará con cinco zonas: un área especializada para empresas que necesiten intercambio entre modos de transporte, otra para compañías de transporte por carretera y una tercera para firmas de logística de transformación y distribución. Además dispondrá de una zona de servicios y otra para sociedades I+D+i.