La economía de Estados Unidos se enfría y crece la mitad en el segundo trimestre
El producto interior bruto de Estados Unidos creció un 2,5% en el segundo trimestre de 2006, una cifra muy inferior al 5,6% del primer trimestre, según los datos ofrecidos por el Departamento de Comercio.
El resultado provisional, que probablemente será sometido a posteriores revisiones, es cinco décimas inferior a las previsiones de un 3% y deja claro que la economía se ha enfriado tanto como en el último trimestre de 2005, cuando el paso del huracán Katrina provocó un proceso de ralentización de la economía estadounidense.
Entre los factores, según el gobierno de EE UU, que han provocado el retroceso destacan el consumo, que subió un 2,5% frente al 4,8% y el 4,2% de los anteriores trimestres, y el precio del petróleo, cuyo crecimiento (el barril de Texas alcanzó un máximo histórico de 77,03 dólares por barril) sigue provocando serías tensiones inflacionistas en otros productos. Así, la inflación subyacente en el último trimestre (excluidos los alimentos y la energía) ha sido del 2,9%. Este dato es ocho décimas superior al del primer trimestre (2,1%) y es la cota más alta desde el tercer trimestre de 1994, cuando la economía de EE UU se encontraba en plena expansión.
Ante esta situación, el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, afronta una situación difícil de manejar, con la inflación disparada y los tipos de interés en un 5,25% (desde junio de 2004 se han subido 17 veces), lo que le deja un margen muy estrecho para movimientos en el precio del dinero.
La confirmación de la ralentización del crecimiento económico hizo crecer las esperanzas entre los analistas de que la Reserva Federal pueda decidir un parón en la política de ajustes monetarios mesurados y graduales, iniciada en junio del 2004.