_
_
_
_
Crisis energética boliviana

España exige aclaraciones y advierte de las consecuencias en la relación bilateral

Sorpresa e inquietud en los Ejecutivos europeos ante la decisión del Gobierno de Evo Morales de nacionalizar los hidrocarburos, una medida que puede tener graves consecuencias para las inversiones de compañías comunitarias (Repsol, British Petroleum y Total). El Gobierno español, que se reunirá con las empresas afectadas, exigió a Bolivia aclaraciones y advirtió de las 'consecuencias' en las relaciones de ambos países, mientras Bruselas lamentó que Morales actúe sin consultar con el sector.

En un comunicado oficial distribuido por el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Ejecutivo español anunciaba ayer que ha convocado al encargado de negocios boliviano, Álvaro del Pozo, en relación con el Decreto Supremo 28.701 firmado por el presidente del país andino, Evo Morales, que establece la nacionalización de los hidrocarburos del país. El objetivo del Gobierno español, explicaba la nota, es manifestarle 'su más profunda preocupación' por esta medida y sus 'consecuencias para las relaciones bilaterales'. Una preocupación, subraya la nota, que se 'hace extensiva a las formas que han rodeado su adopción'.

Exteriores advirtió, asimismo, que 'se le ha recordado el compromiso de las autoridades bolivianas de facilitar el texto del decreto para que pueda ser estudiado con detenimiento y se puedan pedir las aclaraciones pertinentes'. También comunicó a Del Pozo que el Gobierno español 'espera que a través del diálogo y la negociación se llegue a una solución satisfactoria para las partes'.

Mientras se conocen los detalles de la medida adoptada en Bolivia, la vicepresidenta del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, anunció que el Ejecutivo tiene previsto reunirse con las empresas españolas con intereses en el país andino para analizar la nacionalización energética, un encuentro que se celebrará 'previsiblemente esta semana' y será convocado por el ministro de Industria, José Montilla, con el fin de repasar las garantías jurídicas de estas empresas.

La preocupación del Gobierno español era plenamente compartida por el Ejecutivo comunitario que, a través del portavoz oficial, Johannes Laitenberger, lamentó la estatalización de los hidrocarburos. 'Morales había incluido la nacionalización en su programa electoral', admitió el portavoz oficial de la Comisión. 'Pero, dicho esto, esperábamos que hubiera sometido la medida a una consulta previa con el sector', añadió.

La decisión, además, 'puede tener un impacto negativo en un mercado que ya soporta enormes tensiones en cuanto a los precios', advirtió el portavoz del comisario europeo de Energía, Andris Piebalgs. Una nueva escalada del precio del crudo pondría en peligro la recuperación de la economía de la zona Euro, que la CE se disponía a confirmar en las previsiones que publicará el día 8.

El decreto de La Paz, en cambio, no tendrá consecuencias, en su opinión, para la seguridad del suministro energético de la UE, porque los flujos comerciales con el país andino apenas alcanzan el 0,01% tanto de las importaciones como de las exportaciones comunitarias. La situación puede ser más delicada para Bolivia, porque la UE es su tercer socio comercial, sólo por detrás de Brasil y EE UU.

Por su parte, para el alto representante para la Política Exterior de la UE, Javier Solana, la decisión no beneficiará a Bolivia ni a su desarrollo político y económico, ya que la seguridad jurídica es 'fundamental' para que las empresas extranjeras se animen a invertir en el país andino. En España, el líder del PP, Mariano Rajoy, afirmó que la decisión supone un 'varapalo' al Gobierno español, y opinó que los socialistas deberían 'reflexionar' sobre su política exterior.

cumbre El decreto amenaza la reunión de líderes de la UE, América y Caribe

l Fuentes oficiales reconocen en Bruselas que la decisión de Morales supone una seria amenaza para el desarrollo de la Cuarta Cumbre de líderes de la UE, América Latina y el Caribe que se celebrará en Viena el próximo 12 de mayo. La medida también marcará, sin duda, la cumbre empresarial que se celebrará el mismo día en la capital austriaca, con la presencia previstas de directivos de compañías como Telefónica, BBVA o Fenosa.l La CE confiaba en que Viena fuera el arranque para la negociación de un acuerdo de asociación con la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela). Pero la nacionalización del petróleo y el gas en Bolivia, así como la posibilidad de que Venezuela abandone ese foro regional, hacen ya casi imposible que se produzca algún avance importante'.l Tampoco se presenta fácil que las dos partes superen los desencuentros que marcaron la última cumbre (2004) en la ciudad mexicana de Guadalajara. Y parece inevitable que la creciente indiferencia de Bruselas hacia Latinoamérica no haga sino aumentar con el protagonismo adquirido al otro lado del Atlántico líderes como Morales, Chaves, Castro o Humala.

Más información

Archivado En

_
_