Reino Unido vive un día de caos por la huelga de sus funcionarios
El Reino Unido vivió ayer un día complicado por la huelga a la que estaban llamados un millón y medio de funcionarios municipales, que protestan contra la reforma de la ley de pensiones que les impedirá seguir jubilándose a los 60 años. La huelga, apoyada por once sindicatos del país, fue secundada por un millón de empleados públicos, según fuentes sindicales y por unas 400.000 personas, según la Asociación de Gobiernos Locales.
Según distintas fuentes sindicales, la de ayer fue la mayor huelga vivida en el Reino Unido desde 1926, y se tradujo en cierres de escuelas, guarderías, estaciones de bomberos, paralización del servicio de recogida de basuras y en un auténtico caos circulatorio a primera hora de la mañana en todo el país. Los paros y las protestas afectaron a todos los ayuntamientos, asociaciones de viviendas y otros servicios sociales.
Los sindicatos amenazan con prolongar las protestas en las próximas semanas si el Gobierno de Tony Blair no abandona su idea de abolir la ley que permite a los funcionarios municipales jubilarse a los 60 años, si han trabajado durante 25 años.