El proyecto FON no asusta a los operadores inalámbricos
Las 'telecos' ven imposible crear una red de calidad compartiendo conexiones
Un total de 4.000 nuevos usuarios se registraron en FON al día siguiente de anunciar la inyección de 18 millones aportada por Skype, Google, Sequoia e Index Capital al proyecto de Martin Varsavsky para crear una red mundial inalámbrica basada en la idea de compartir las conexiones Wifi. FON fue noticia en 88 periódicos de EE UU y vendió en un sólo día 2.900 routers especialmente preparados para esta red, cuando desde el pasado octubre sólo había colocado 300 equipos. Varsavsky, el emprendedor más activo de internet en España, ha logrado alistar a 9.000 foneros en un tiempo récord lo que dota de mayor empaque a su proyecto que empieza a tomar forma, aunque aún está lejos de consolidarse como un negocio.
Pese a este espectacular despegue y el renombre internacional de sus nuevos socios, los teleoperadores miran hacia FON con cierta incredulidad pues desconfían de que se pueda llegar a crear una verdadera red sin inversiones en infraestructuras. Por el momento, FON se parece a cualquiera de las múltiples comunidades virtuales que existen en España desde principios del 2002 como Madrid Wireless o Red Libre, donde una comunidad de vecinos comparte altruistamente su conexión. Pero Varsavsky aspira a llegar a cobrar a los usuarios no registrados, denominados Aliens, cuando necesiten utilizar la red FON que en cuatro años supuestamente llegará a tener un millón de puntos de acceso en todo el mundo.
En cualquiera de los casos, Varsavski asegura que no tiene intención de competir con los proveedores de acceso a internet (ISP), si no a contribuir a que su negocio se amplíe. De hecho, FON está buscando socios entre los ISP a los que propone compartir los ingresos que se obtengan de los Aliens.
Por ahora no ha firmado con ninguno. En Jazztel, la antigua compañía de Varsavsky, reconocen que han estado en negociaciones, pero sin llegar a ningún acuerdo por el momento. En Ya.com, también creada por Varsavsky, dicen que siempre tendrán las puertas abiertas a su fundador, aunque parece difícil que se consolide su relación en tanto que el nuevo propietario, Deutsch Telekom, cuenta en Alemania con una de las redes Wifi de pago más extensas de toda Europa.
Precisamente, FON podría llegar a ser un competidor directo de los operadores que han invertido en crear unas redes con antenas distribuidas por ciudades, hoteles, restaurantes y aeropuertos y que cobran por su uso. En España están Telefónica, que cuenta con 1.600 puntos de acceso; Kubiwireless, socio de Vodafone, con 250 puntos y un tráfico de 2,5 millones de minutos mensuales, y Swisscom Eurospot, la mayor red paneuropea inalámbrica gracias a sus acuerdos con las cafeterías Starbucks y las grandes cadenas hoteleras.
'Nuestro foco es el viajero de negocios. FON parece que tiene un enfoque puramente residencial para crear una red paralela a la de negocio', asegura Carlos Riopedre, director comercial de Kubiwireless, que cree que FON podría llegar a ser un complemento para las redes profesionales. Varsavsky incluso ya ha hablado de que Swisscom estaba interesada en el proyecto, aunque desde la compañía suiza prefieren no hacer comentarios.
Lo que ponen en duda todos los operadores de pago es la capacidad de mantener un nivel de calidad en una red gratuita como para llegar a cobrar a los Aliens.
'¿Quién pagará una antena cuando se averíe? ¿Cómo van a asegurar que nadie copia mis datos cuando me conecto a esa red abierta?', se preguntan desde Telefónica, que dicen que la tendencia en las redes Wifi está siendo que al final alguien asuma el coste, ya sea el hotel o la cafetería o que se le cobre directamente al propio usuario.
Wifi o la tentación de engancharse al ADSL ajeno
Para entrar en la internet sin cables sólo hace falta una tarjeta PCMCIA, que ya viene integrada en todos los nuevos equipos o se puede incorporar por medio de un dispositivo USB, junto con un router inalámbrico que ofrece cualquier ISP. Estos dos elementos suponen contar con libertad de movimientos para conectarse al ADSL en el hogar o en la oficina, pero si no se toman las medidas necesarias también podrán conectarse todos los vecinos.Las redes Wifi necesitan ser parametrizadas para restringir el acceso a determinados usuarios mediante el uso de contraseñas. Un sólo router Wifi de última de generación, como el de 3Com que está ofreciendo Ya.com, tiene una cobertura de 500 metros y permite crear una red local inalámbrica de 200 equipos a una velocidad de hasta 54 Mbps. Basta con abrir un ordenador para localizar los accesos Wifi en la zona, y muchos de ellos, voluntariamente o no, permiten engancharse a su ADSL.La entrada de estos invitados va a traducirse en un descenso en la velocidad de conexión. Además, los riesgos de seguridad se multiplican ya que existe un riesgo mayor de que cualquiera pueda entrar a los datos guardados en un equipo cuando está conectado a una red abierta.Estos elementos críticos son los que despiertan más recelo ante el proyecto FON, cuyos miembros han de compartir el 50% de su ancho de banda. Quizás no es tan molesto para los Linus, que ceden su conexión a cambio de cobertura en el resto de los puntos, pero puede resultar inaceptable para los Aliens, que pagarán por un servicio que no tiene unas garantías de seguridad ni una velocidad mínima de acceso.
Redes: Los usuarios de Wifi ya suman seis millones en España y siguen avanzando
Dentro de dos años, España contará con un mínimo de 13 millones de usuarios de Wifi en España, según las estadísticas más recientes del Observatorio Wireless de IWE-X. Hoy se calcula que la cifra sobrepasa ya los seis millones y avanza imparable. Para 2008, esta tecnología moverá un negocio que rondará los 2.400 millones de euros.
Los más inalámbricosMadrid, Barcelona, Valencia, Bilbao y Sevilla son las ciudades donde más puntos de acceso Wifi (hotspots) hay por metro cuadrado. De las cuatro, las dos últimas son las que han experimentado los mayores crecimientos en los últimos cuatro meses, con un alza del 150% y 174%, respectivamente.
Más iniciativasMuchas comunidades y municipios han puesto en marcha iniciativas Wifi. Por ejemplo, Extremadura ha llevado esta tecnología sin cables a su campus universitario y el pasado octubre inauguró Rinuex, la red inalámbrica de la Universidad de Extremadura, que ha sido sufragada por dos empresas extremeñas, Infostock y Extela.com. También el Ayuntamiento castellano manchego de Alcalá la Real ha anunciado que todos sus vecinos tendrán una conexión a internet de banda ancha desde este mes de febrero, tras negociar la instalación correspondiente con el operador Ono.
Privados y públicosLa mayoría de los hotspots contabilizados en España hasta octubre del pasado año (7.117) eran privados (un total de 6.540) frente a 577 comerciales. Y el grueso de los no residenciales (un 80% aproximadamente) se encuentran en hostelería (hoteles, bares, pubs, centros comerciales...) A nivel mundial, el 48% de las antenas no privadas están, en cambio, en aeropuertos, estaciones de trenes y autobuses; el 39% en hostelería; el 4% en centros de enseñanzas, y el 9% al aire libre.
Del portátil al móvilLa tecnología Wifi tiene aplicaciones en todos los dispositivos posibles. Hoy el uso más extendido está en los PC de sobremesa para eliminar los cables a la hora de conectarse a internet y en los portátiles para poder acceder a datos en cualquier lugar. De hecho, la integración de tarjetas Wifi combinadas con tecnología 3G es cada vez más habitual en los ordenadores portátiles. Otra de las aplicaciones más prometedoras es su integración con los teléfonos móviles, que abre un nuevo mercado para la voz sobre IP.