Ferrovial reorganiza el negocio de la filial Swissport
Ferrovial quiere un esquema de negocio más eficiente para la filial de servicios en aeropuertos que compró hace medio año, Swissport. Con esta idea, ha decidido cambiar la estructura del primer operador independiente en este mercado para ordenarla por líneas de negocio, en vez de por áreas geográficas como está ahora.
El segundo grupo constructor y de servicios creará tres grandes unidades, según las líneas de negocio: una gestionará los servicios a pasajeros y en rampa (ground handling); otra, servicios de carga (cargo services); y una tercera para repostaje, seguridad o líneas de aviación para ejecutivos (emerging business). Además, la primera se dividirá en tres unidades: Suiza y Alemania, Europa, Asia, Oriente Próximo y África, y, por último, América.
El nuevo modelo, que entrará en vigor el 1 de abril, responde a 'necesidades del mercado' ya que las aerolíneas demandan servicios 'cada vez más sofisticados' y que se presten 'a nivel internacional', explican fuentes del grupo. Es, asimismo, un paso para dar mayor eficiencia.
La constructora que controla la familia Del Pino ha apostado por el equipo de Swissport, que sigue dirigiendo Joseph In Albon. Si bien, ha incorporado a varios ejecutivos procedentes de Ferrovial para dirigir las áreas financiera, de recursos humanos, desarrollo corporativo y asesoría jurídica.
En lo que va de año, Swissport ha conseguido dos grandes contratos con aerolíneas de bajo coste. Uno es la ampliación por seis años y a más servicios del acuerdo que ya tenía con Ryanair en el aeropuerto londinense de Stansted, su base de operaciones. Además, en enero logró otro contrato con Tiger Airways, con base en el sureste asiático, para encargarse del handling en el aeropuerto de Singapur por cinco años. Estos dos se unen al reciente acuerdo con EasyJet en el aeropuerto de Ginebra.
La compra de Swissport en agosto pasado por 646 millones (incluida la deuda) llegó por sorpresa. Con la operación, el grupo arrebató a su rival ACS el socio que se había procurado para competir por el handling en los aeropuertos españoles (unos 700 millones), que aún están en fase de licitación. Ferrovial acude de la mano de Swissport y de Menzies, que ya era socio antes de la compra.