Arco inviertirá 100 millones para competir con Paradores
Convertir a Haciendas de España en una opción frente a Paradores y apostar por la internacionalización de los vinos españoles. Son dos de los objetivos de Víctor Redondo, presidente del grupo Arco, que acaba de reforzar su control sobre la compañía.
El presidente Arco, el segundo grupo bodeguero español, ha reforzado su control sobre la compañía al cerrar un acuerdo para comprar el paquete accionarial (17%) controlado por el fondo británico Bridgepoint Capital, mediante una financiación subordinada a 10 años con Madrigal Participaciones, en la que participan las seis cajas de ahorros castellano-leonesas.
Víctor Redondo asegura que esta operación cambia la composición del accionariado 'para que sea más estable'. 'Igual que cambiamos la composición de nuestro negocio con la eliminación de la marcas blancas, hemos cambiado nuestro accionariado'.
Uno de los objetivos del grupo es la internacionalización de los vinos españoles (el vino representa el 93% del negocio de Arco). 'Queremos ser los impulsores del vino español, aumentar la cuota del 3% hasta el 15%', apunta Redondo. El grupo pretende conseguir el 80% de su negocio en el exterior en 2010.
Junto con el vino, los otros dos pilares del negocio son la alimentación y el enoturismo, a través de Haciendas de España. 'Me gustaría que fuesen la alternativa a Paradores', afirma Redondo. Para ello, el grupo invertirá 100 millones de euros hasta 2008 y elevará de tres a 10 el número de establecimientos.
En alimentación, el crecimiento de Arco vendrá vía adquisiciones. 'Tenemos unos recursos propios de 115 millones de euros y una deuda financiera neta inferior a 25 millones. Tenemos capacidad financiera para una compra que cambie el negocio de alimentación de la compañía, pasar a primera división', apunta Redondo.
En vino, 'el mercado español está sobreinvertido, hay una guerra de precios salvaje' afirma. 'Tuvimos un boom hasta 2001, que nos benefició a todos mucho, pero ahora tenemos una situación de crisis, de sobreproducción'. Por eso, cree que va a haber una 'racionalización y detrás un nuevo periodo de concentración'. En ese contexto, el presidente del grupo Arco apuesta por sentarse 'a esperar a ver qué globos se desinflan y cuáles son aquéllos en los que merece la pena entrar, porque cuando acabe este proceso va a haber oportunidades y habrá que estar allí para comprar', asegura.
En cuanto a la compra de Allied Domecq por parte de Pernod Ricard, Redondo manifiesta sus dudas acerca de la gestión del grupo galo sobre la división Bodegas y Bebidas (ahora Domecq Bodegas). 'No sé muy bien qué quiere hacer Pernod con Bodegas y Bebidas, no lo acabo de entender', y apunta que 'si en algún momento' esta división, 'se nos pusiera a tiro a un precio razonable, estaríamos encantados de verlo con interés'
El boicot al cava catalán va a afectar a los resultados del grupo, que comercializa Marqués de Monistrol. 'Es pronto para darlo por hecho pero nos puede restar un 5% de los resultados'. El grupo alcanzará una facturación en 2005 de unos 210 millones.
Nuevo socio financiero para crecer en el exterior
El grupo busca oportunidades de negocio en otros países. 'En los últimos meses, he tenido oportunidades de inversión en bodegas de Argelia, Rusia, Francia, Sudáfrica, Chile y Argentina', apunta Víctor Redondo.Sin embargo, ante el perfil de alto riesgo de estas inversiones, 'no creemos que Arco, tal y como está configurado, sea el mejor vehículo para afrontarlas en solitario', apunta el presidente del grupo.'Uno de los planteamientos, que está relativamente avanzado, es tener un socio internacional muy financiero que nos acompañe', afirma Redondo, con el objetivo de evitar elevar el perfil de riesgo de las inversión de Arco. 'En los próximos tres meses habremos cubierto esta fase. Compartiremos el riesgo para que sea más llevadero'.