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CincoSentidos

Colofón a la carrera de Bonald

No por esperado deja de halagar al autor literario que el jurado de un premio importante se fije en su obra. En el caso de José Manuel Caballero Bonald (Jerez de la Frontera, Cádiz. 1926), distinguido ayer con el Premio Nacional de las Letras Españolas 2005, los galardones se agradecen, pero siempre que no sean 'de tipo comercial'.

El Nacional de las Letras parte del Ministerio de Cultura, está dotado con 30.000 euros y no tiene nada que ver con editores ni lanzamientos comerciales. Y es que el escritor gaditano protagonizó meses atrás una fuerte polémica en el Premio Ciudad de Torrevieja 2005. Como presidente del jurado criticó la obra ganadora, de César Vidal, y prometió que no volvería a participar ni a recoger un premio comercial.

El autor de Las Adivinaciones (1952), Las horas muertas (1959) y Laberinto de Fortuna (1984), entre otras, declaró a Europa Press que 'cuando uno llega a cierta edad espera que se lo den. Pensaba que ya era hora'.

Caballero Bonald, licenciado en Filosofía y Letras, poeta, novelista y ensayista, compuso versos hasta 1969, como miembro destacado de la generación poética del 50. Desde esa faceta ha obtenido reconocimientos como el Premio Boscán, el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana y el de la Crítica.

Su desembarco en la narrativa se produce a partir de Dos días de Septiembre (1962), con el que consiguió el premio Biblioteca Breve. A este brillante comienzo sucedieron otros éxitos, como Ágata ojo de gato (1974, Premio de la Crítica), Toda la noche oyeron pasar pájaros, En la casa del padre y Campo de Agramante.

'He procurado interpretar la vida siempre a mi manera a través de una prosa cuidada o de un verso con esmero estilístico, junto a una profundización e indagación en el lenguaje para conseguir aproximar la idea a la escritura', dijo ayer el premiado desde su casa de Madrid.

Tras una noticia que corona toda una vida dedicada a la literatura, Caballero Bonald asegura que le queda mucho por contar. Su último libro es de poesía, se titula Manual de Infractores y fue editado el pasado mes de octubre por Seix Barral.

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