Fomento propone endurecer el control sobre las subcontratas

Más control sobre las subcontratas. Con este fin, el Ministerio de Fomento ha propuesto una serie de medidas para incluir en el anteproyecto de ley de contratación del sector público. Entre ellas figura exigir a las empresas contratistas más información sobre qué importe prevén subcontratar y que cualquier cambio sobre la comunicación inicial tenga que ser autorizado expresamente. Además, le hace responsable solidario de los daños personales de los trabajadores subcontratados.

Las constructoras tendrán que ejercer un mayor control sobre las subcontrataciones. Es una de las consecuencias que tendrá la nueva ley de contratación del sector público que ultima el Ministerio de Economía si se incluyen las propuestas de Fomento. El objetivo es endurecer la vigilancia sobre las subcontratas. Y lo quiere hacer por varias vías.

El departamento que dirige Magdalena Álvarez quiere que la obligación de identificar las subcontratas conste en la ley y que las compañías, además de la parte del contrato encargado a terceros, indiquen el importe y los subcontratistas previstos. Así consta en las propuestas que Fomento ha enviado al Ministerio de Pedro Solbes.

Cualquier cambio o ampliación que proponga el subcontratista debe recibir la autorización expresa de la mesa de contratación. Lo usual en el sector es que las constructoras adjudicatarias amplíen sobre la marcha la cadena de contratos con terceros.

Al imponer el visto bueno expreso del órgano de contratación desaparece el silencio administrativo positivo que permitía a las empresas ampliar subcontratas después de haberse adjudicado una obra del Estado. Las mayores cadenas de subcontrataciones suelen darse con las grandes empresas, que las justifican por la especialización exigida.

Una medida novedosa es que el contratista principal 'responderá solidariamente con el subcontratista por los daños personales a los trabajadores' subcontratados, explican fuentes de la Administración. Persigue, por un lado, una mayor garantía de los derechos de los trabajadores y, por otro, dar mayor responsabilidad a la adjudicataria para que 'de manera prudente se erija en el mejor controlador' de los subcontratistas con el fin de prevenir cualquier riesgo.

Limitar la subcontratación excesiva es una de las demandas del propio sector. Para los sindicatos es, desde siempre, principal caballo de batalla ya que ligan las subcontratas a la alta siniestralidad laboral. Esta polémica ha vuelto al primer plano tras el accidente de hace dos semanas en Granada el que murieron seis trabajadores tras caerse un viaducto en construcción. Todos menos uno pertenecían a una empresa subcontratada a su vez por una subcontratista de los adjudicatarios Ploder, Azvi y Obras Subterráneas.

El accidente, sin embargo, no ha sido la causa de esta batería de medidas de control que 'llevaban meses en estudio', señalan las citadas fuentes. Si bien llega en un momento clave. De hecho, sindicatos y patronal están negociando un acuerdo.

Mayor compromiso del contratista

Otra de las propuestas de Fomento es hacer que los compromisos que asume el contratista frente a las subcontratas 'queden incorporados como condiciones de ejecución del contrato siéndole por tanto exigibles salvo que los cambios sean autorizados', como consta en el documento que ha recibido Economía. Así los requisitos exigidos para la subcontratación pasarían a ser una condición del propio contrato con la Administración.

Si la empresa adjudicataria incumple esos compromisos puede ser considerado como una infracción grave.

Por último, Fomento propone que a la hora de ponderar la oferta técnica y su calidad 'se podrá tener en cuenta' qué aportan los subcontratos, algo que ahora no se juzga.

Sanción grave

Si el contratista no vela por la correcta ejecución del contrato en las condiciones de subcontratación que ofreció puede ser considerado 'infracción grave' que se castigará con una prohibición de hasta un año de optar a obras de Fomento. Así lo propone el ministerio.

El silencio administrativo pasa a ser negativo

La propuesta que ha elaborado el Ministerio de Fomento para modificar la ley de contratación pretende que no existan resquicios por los que pudiera escapar al control administrativo la actividad de los subcontratistas.Con el objetivo de velar por el buen fin del contrato y la regularidad de las subcontratas, 'se estima que la alteración de las subcontrataciones deberá estar justificada y autorizada expresamente por el órgano de contratación'.Una vez que el contratista haya presentado toda la documentación requerida notificando que va a subcontratar una actividad que no había previsto inicialmente, el órgano de contratación tendrá de plazo un mes para resolver esta solicitud. De no pronunciarse en dicho periodo, el contratista podrá entenderla desestimada por silencio administrativo, lo que le permitirá interponer el recurso que proceda.Fomento pretende con la introducción de este endurecimiento que no escape al control del órgano de contratación el conocimiento de la identidad y solvencia del subcontratista, así como la regularidad de la situación del personal que participa en la obra.Las nuevas cautelas que establece el texto sobre el uso del silencio administrativo persigue evitar que pueda surgir cualquier situación indeseable.El calendario con el que trabaja el equipo que elabora el anteproyecto de ley, en el que hay varios ministerios, es que se vea en Consejo de Ministros cuanto antes para que pase al Congreso a principios del año próximo.