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Energía

Bruselas decide mañana si el Gobierno juzga la opa de Gas Natural a Endesa

La incertidumbre sobre la autoridad competente en la opa de Gas Natural sobre Endesa llega a su fin. La Comisión Europea tiene previsto pronunciarse mañana en Estrasburgo sobre la dimensión comunitaria o nacional de la operación. El Gobierno reivindica su competencia, frente al intento de la eléctrica de que Bruselas tenga la última palabra. Varias fuentes apuntan que la Comisión recomendará que la opa sea revisada en España.

El departamento comunitario de Competencia que dirige la comisaria Neelie Kroes ha necesitado dos meses para llegar a la conclusión que presentará mañana ante el pleno de la Comisión Europea. Bruselas ha mantenido a lo largo de este tiempo un largo regateo con Gas Natural y Endesa que han defendido, respectivamente, la dimensión nacional y comunitaria de la oferta. Endesa asegura que más de un tercio de su facturación europea procede de fuera del mercado español, lo cual otorgaría a la Comisión el derecho exclusivo a revisar la operación. Las largas negociaciones han provocado una enorme tensión entre el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y la Comisión de José Manuel Barroso. Madrid ha reivindicado la competencia española en la operación frente a lo que muchos interpretan como un intento de injerencia por parte de Bruselas.

Kroes y su equipo parecían hasta la semana pasada dispuestos a proclamar su competencia en el expediente, exponiéndose a a un recurso judicial inmediato por parte de la gasística y del Gobierno. El viernes pasado, sin embargo, fuentes familiarizadas con la operación apreciaban 'un giro favorable hacia las tesis de Gas Natural' y entre los partidarios de la dimensión nacional de la opa cundía el optimismo. Fuentes citadas por Reuters y otros medios aseguran que 'Kroes recomendará que la opa sea revisada por España'.

El departamento de Kroes mantiene el hermetismo sobre su análisis. Fuentes internas de la Comisión incluso subrayan que la comisaria ha mandado redactar dos decisiones de apariencia idéntica pero con conclusiones opuestas para intentar evitar las filtraciones.

Fuentes cercanas aprecian un ¢giro favorable¢ hacia las tesis que defienden la competencia española

La propuesta final de Kroes será analizada hoy por los jefes de gabinete de los 25 comisarios europeos. Mañana, la comisaria holandesa la someterá a la consideración de sus colegas. Pero en un enésimo giro en su actitud frente a este expediente, adoptará la decisión final en solitario, sin obligar a los comisarios, como había indicado anteriormente, a pronunciarse sobre los resultados contables de Endesa. Fuentes de la CE ya habían alertado sobre el peligroso precedente que sentaría una votación política sobre un asunto técnico y el riesgo que suponía para la credibilidad de la Comisión como autoridad europea de competencia.

Esa credibilidad, sin embargo, ya está amenazada. Los titubeos de Kroes harán que la decisión final de la Comisión, cualquier que sea, despierte sospechas sobre la neutralidad de la comisaria. Kroes, probablemente, deberá defender además ante los jueces comunitarios su decisión.

La politización del caso, a escala europea

 

La opa de Gas Natural sobre Endesa provocó numerosas interpretaciones políticas a escala nacional, pero Manuel Pizarro, presidente de la eléctrica, decidió además llevar el conflicto a la arena comunitaria. Y contó enseguida con el apoyo del Partido Popular para politizar el caso también en ese terreno. El eurodiputado Jaime Mayor Oreja ha sido el ariete del PP en Bruselas para presionar sobre una Comisión Europea que preside su correligionario José Manuel Barroso. La actuación de la Comisión ha sido objeto, desde entonces, de una interpretación en clave de política nacional. La presencia en Italia de la titular de Competencia, Neelie Kroes, y de la ex comisaria de Energía, Loyola de Palacio, en una conferencia sobre redes de transporte, se transformó en un encuentro secreto para resolver la opa. El grupo socialista europeo ha llegado a pedir la inhibición de Kroes en el caso como consecuencia de sus conflictos de interés. La relación de José María Aznar con Barroso (inmortalizada en la foto de las Azores) también dio pie a una 'línea telefónica permanente' entre ambos para frustrar la operación. La paranoia se ha acentuado ante la inminencia del veredicto de la Comisión. El entorno de la eléctrica y del PP está propagando que una decisión negativa a sus intereses delataría un pacto de la Comisión con el Gobierno de Rodríguez Zapatero, que incluiría la renuncia de España a los fondos estructurales. El rumor obvia que la negociación de los fondos no es entre Madrid y Bruselas, sino entre España y los 24 países de la UE. Por su parte, el ministro español de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, dijo que asumirá el dictamen de Bruselas 'dependiendo de lo que diga y cómo lo diga', informa Europa Press.

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