Las escuelas de negocios salen a la caza del talento
Las pruebas de admisión de estos centros son cada vez más exigentes
Es un círculo nada vicioso en el que las dos partes implicadas obtienen beneficios: quienes se han graduado en una buena escuela de negocio hacen gala de ello en sus currículos y, a la vez, las buenas escuelas de negocio prefieren que los mejores estén con ellas. La ecuación es sencilla: el prestigio llama al prestigio. Por eso, en los últimos tiempos, el nivel de exigencia para ser admitido en un centro de posgrado es cada vez mayor.
'æpermil;ste es uno de nuestros objetivos clave, conseguir la mejor materia prima', resume el director de admisiones del Instituto de Empresa, idea que corrobora el vicedecano académico de Esade, Josep Bisbe. 'Desde hace varios años, lo que nos permite estar donde estamos es nuestra capacidad de atraer el talento, tanto de profesores como de alumnos', señala.
Así actúan las escuelas más destacadas del país, situadas entre las mejores del mundo. La relevancia de la calidad de los alumnos se demuestra en listas como la recién publicada por The Wall Street Journal, fundamentada precisamente en la opinión que tienen las empresas de los graduados. Este listado de los 20 mejores centros del planeta, en el que aparecen Esade (20 puesto), el Instituto de Empresa (120) y el IESE (190), valora las aptitudes técnicas y analíticas de los alumnos, así como sus habilidades comunicativas, su potencial de trabajar en equipo, su capacidad de liderazgo, su integridad personal y su compromiso ético. Si su puntuación es alta, la escuela sube en la lista; si esto ocurre, los futuros participantes querrán acudir a ese centro. Y así sucesivamente. Lo que sucede es que para los programas MBA, como media, sólo uno de cada tres aspirantes lograr una plaza en las escuelas más punteras. ¿Cómo asegurarse de que es el mejor de todos? Hay varios sistemas previos a las pruebas de acceso, que también se han endurecido. 'Realizamos la captación de alumnos a través de las ferias internacionales y gracias a los rankings', detalla Josep Bisbe. En esas reuniones, las escuelas dan información a posibles alumnos y de paso los conocen de cerca. 'Los participantes quieren una formación de impacto y nosotros organizamos sesiones informativas en ciudades europeas y americanas para que sepan qué ofrecemos', cuenta el director de relaciones internacionales del IESE, Jordi Utges. Las universidades, lógicamente, son el caldo de cultivo perfecto. Así, el Instituto de Empresa organiza en las facultades cursos de tres días, por ejemplo, de creación de empresas. 'Acuden 30 personas, y al final sabes cuáles son las cuatro o cinco con mejor actitud, mayor interés y más aptitudes. A esas intentas mantenerlas informadas porque tienen perfiles muy valiosos', apunta Julián Trigo.
'El filtro para llegar a las escuelas cada vez es más duro', dice Jordi Utges, director de relaciones internacionales del IESE
Otra forma aún más directa de captar el talento es ofrecer becas a los mejores. Desde hace dos años, el Instituto de Empresa da un curso de tres días a los 200 mejores universitarios de México, reunidos por la cadena de televisión Televisa. De todos ellos, el IE elige a media docena y les paga parte del programa MBA Full Time. 'Seguramente están entre los 10 o 20 mejores expedientes del año', señala Trigo.
El filtro para llegar a las escuelas 'cada vez es más duro', dice Jordi Utges. 'Antes la admisión era más sencilla y la criba se hacía durante el programa. Ahora controlamos el proceso desde el principio. Entendemos que así hay más garantías de éxito para esa promoción', añade. El vicedecano académico de Esade, Josep Bisbe, matiza que, en general, las escuelas piden 'más experiencia profesional a los alumnos, más competencias y habilidades personales y mejor nivel de inglés'. Según Julián Trigo, 'lo que nos interesa no son sólo expedientes brillantes, sino gente con motivaciones, que haya viajado, que haya asistido a conferencias, que hable idiomas, que haya hecho prácticas. El mercado es cada vez más exigente'.
Los mejores programas, en una guía
Círculo de Progreso acaba de editar la Guía Internacional de Programas de Posgrado. Dices 2005-06, una publicación que permite conocer las mejores escuelas de negocios del mundo. Este libro, que se distribuye gratuitamente y que sirve de complemento a la Guía de Máster y Cursos de Posgrado. DICES 2005-2006 se estructura en torno un análisis del panorama académico internacional. La obra permite comparar y valorar los diferentes centros y programas de posgrado, y además ofrece consejos para encontrar financiación a los estudios, una guía práctica para vivir y estudiar en el extranjero, información sobre cómo convalidar los estudios en otro país y, entre otras cosas, modelos para escribir cartas de solicitud de becas o de admisión.La parte central de la guía se divide en siete secciones: MBA; Arte y Humanidades; Negocios, Economía y Finanzas; Formación OnLine; Ingeniería, Tecnología y Arquitectura; Ciencias de la Salud y Experimentales y Ciencias Sociales y Derecho. La guía ofrece una ficha de las escuelas de negocios que imparten algún programa en estas áreas, en la que se incluye información sobre el precio, las pruebas de acceso, los requisitos para la admisión, las fechas de inscripción y otros detalles de utilidad práctica.
GMAT, un examen que sirve de referencia para todos
Aparte de salir a buscar a los mejores, las escuelas de negocios están endureciendo sus pruebas de acceso. En el Instituto de Empresa, los candidatos deben superar un test psicotécnico (razonamiento verbal, numérico y espacial), otro de personalidad y una entrevista personal. Además, deben poseer un excelente nivel de inglés y un buen expediente. Algunas escuelas tienen pruebas específicas y muchas de ellas (alrededor de 850 en todo el mundo) exigen a los aspirantes una puntuación mínima en el GMAT (Graduate Management Admission Test), una prueba realizada en inglés que evalúa los conocimientos en lengua, matemáticas y redacción analítica y es una referencia mundial.La calificación se mueve en un rango de 200 a 800 puntos; dos tercios de los candidatos obtienen entre 400 y 600 puntos. Pues bien, la nota media de los admitidos en Esade es de 640, y en el IESE asciende a 680 puntos.