El temor a un parón del crecimiento sacude a las Bolsas europeas

Día de contrastes. La Bolsa europea vivió ayer una de las peores sesiones del año, con pérdidas superiores al 1% en todos sus grandes índices, entre ellos el Ibex, que cedió un 1,21%. En cambio, Wall Street registró una jornada espectacular, con subidas del 1,7% en el Nasdaq y el 1,5% en el S&P.

Cada vez más lejos de los 11.000 puntos. Desde que el Ibex acarició esa cota psicológica hace dos semanas y marcó el máximo de los últimos cuatro años al cerrar a 10.919,2 puntos, el selectivo ha cedido un 4,7%. La sesión de ayer fue una de las peores del año, con una caída del 1,21%, que en algunos momentos llegó a superar el 1,6%. Al final el Ibex cerró en 10.402,5 puntos y sólo tres valores lograron concluir con ganancias, fueron Unión Fenosa (0,22%), Bankinter (0,12%) y Banco Popular (0,10%).

Muchas compañías salieron gravemente perjudicadas de la sesión. Fue el caso de Antena 3, Cintra, Sacyr y Gamesa, que registraron pérdidas superiores al 4%. De los 31 valores del Ibex que registraron pérdidas, sólo cuatro lograron caer menos de un 1%.

Pese a estos números tan negativos, el Ibex fue el mejor índice de Europa. Las pérdidas fueron mucho mayores en los casos del Dax de Fráncfort, que cedió un 2,05%, el Cac de París, que se dejó un 1,93%, el Footsie de Londres, que bajó un 1,83% o el S&P/MIB de Milán, que cayó un 1,77%. En el caso del mercado alemán,se trató de la caída es la más fuerte en términos porcentuales desde abril. Ninguno de los sectores industriales de la Bolsa europea logró concluir con beneficios. La peor parte se la llevaron los sectores de materias primas, con una caída del 3,32%, y el automovilístico, que descendió un 2,67%.

En cualquier caso, la corrección de ayer bien puede convertirse en un vuelo muy corto a tenor de la excelente sesión vivida ayer en Wall Street. La Bolsa de EE UU abrió a la baja pero remontó aupada por ganancias de compañías como la tecnológica UTX, que presentará resultados hoy y que ayer cerró con una subida del 3,5%. El Nasdaq cerró con una subida del 1,71%. Las ganancias tampoco fueron cortas en el S&P (1,49%), ni en el Dow Jones (1,25%).

Y todo ello a pesar del temor a lo que pueda provocar el huracán Wilma, el más potente que se haya conocido nunca, con vientos de más de 280 kilómetros por hora, que amenaza la costa del Estado de Florida y que se espera que toque tierra esta misma semana.

El huracán Katrina ya provocó una interrupción de suministro de petróleo equivalente al 11,2% de la producción anual del golfo de México e hizo que el barril de crudo Brent registrara hace exactamente un mes la mayor subida intradiaria de su historia, un 6,15%. No obstante, los buenos datos de reservas de crudo publicados ayer hicieron que el Brent bajara un 1,15%, hasta 58,6 dólares.

Los elementos clave del mercado

 

Nuevas presiones para un petróleo estructuralmente caro

La crisis que llevaba anunciándose desde hace años, ante las graves carencias de renovación en la infraestructura petrolera de refino y distribución se ha cristalizado este año en forma de precios estructuralmente altos. El barril de crudo Brent, el de referencia en Europa, ha caído un 8,7% este mes, pero aún conserva una revalorización anual del 44%.De hecho, pese a que ayer perdió un 1,5% gracias a la mejora inesperada de las reservas de gasolina, el barril cerró en Londres a 58,6 dólares, un precio que duplica el promedio de los cinco años anteriores.

La temporada de presentación de resultados empieza en positivo

El miedo a un parón en el ritmo de crecimiento de los beneficios empresariales cunde a pesar de que hasta ahora las cifras quitan la razón a los pesimistas. Los beneficios de Intel estuvieron un 2,4% por debajo de lo esperado, pero los de Altria superaron en un 107% las estimaciones del mercado; los de Merrill Lynch, un 18,4%; los de Yahoo, un 17,6% y los de JPMorgan, un 4%. Hasta la fecha, el crecimiento medio de los beneficios trimestrales publicados por las empresas del S&P 500 es del 15,6%, se cumple así el noveno trimestre consecutivo de crecimiento a doble dígito.

El repunte inflacionario preocupa a los bancos centrales

El peor dato en 15 años. El índice de precios de la producción registró en septiembre un incremento del 1,9%, según los datos publicados esta semana por el Gobierno estadounidense. La cifra podría interpretarse en sentido positivo, ya que refleja un renovado poder de fijación de precios de las empresas, pero el hecho es que el dato alimenta las expectativas de que la Reserva Federal continúe subiendo los tipos de interés ante el repunte del IPC. La Fed ha llevado el precio del dinero del 1% al 3,75% en menos de año y medio. La presión para que el BCE suba tipos crece.

La Fed constata los riesgos en el alza de precios

No es sólo el petróleo. El encarecimiento de los precios no afecta exclusivamente a los activos relacionados con el crudo. Así lo constató ayer la Reserva Federal en su famoso Libro Beige, que viene a ser una radiografía económica del país que su publica siempre dos semanas antes de la reunión del banco central para decidir su política monetaria. 'Numerosos distritos han informado de incrementos de precios en bienes finales', señala la Fed. 'Numerosas firmas de negocios señalaron que esperan que los elevados precios de la energía y los materiales de construcción persistan', advierte la autoridad central.Si el Libro Beige sirviera de guía para intentar anticipar el próximo movimiento de la Fed, el mensaje es de una claridad meridiana: subida de tipos. La Fed se reunirá el próximo 1 de noviembre y, de momento, nadie en el mercado está descontando que la Reserva se decida a llevar el precio del crédito más allá del 4%. La cuestión es si luego seguirá endureciendo la política monetaria o hará una pausa.El informe económico de la Reserva indica, no obstante, que la actividad económica 'continuó su ritmo de expansión en septiembre', lo mismo que el empleo, aunque obviamente se registraron distorsiones en las zonas afectadas por la devastación provocada por el huracán Katrina.