Problemas para Iberia
La aerolínea española de bandera se enfrenta a un panorama difícil. El presidente de Iberia, Fernando Conte, anunció una subida de los precios de los billetes si el precio del petróleo 'sigue en valores altos', por encima de los 60 dólares por barril. 'Nosotros no vamos a entrar en pérdidas', dijo para mostrar su determinación de tomar las medidas de ajuste necesarias para evitar los números rojos. La compañía ya ha pedido a sus empleados una congelación salarial hasta 2008 y vincular parte de las retribuciones a los resultados. Otras medidas pasarían por suprimir rutas que no son rentables y, la de más calado, crear una filial de vuelos baratos.
La subida de precios para repercutir el mayor gasto en combustible será difícil de constatar, pues en este sector las tarifas varían cada vez más de un día a otro y, dentro del mismo vuelo, de un pasajero a otro. Y el escenario de feroz competencia con las compañías de bajo coste no parece propicio para subir precios, al menos en las rutas más disputadas. Parece inevitable un nuevo esfuerzo de reducción de costes, otro más, pero no es el petróleo el único causante.